Actualidad 06 oct de 2020
por Gustavo Pérez Diez
N. Date: Strange How Things Work Out. Cortesía de Galería Luisa Strina
Mientras la mayoría de los principales museos y centros culturales brasileños siguen con sus salas cerradas al público, son algunas de sus más destacadas galerías comerciales las que continúan protagonizando casi en exclusiva la cartelera de exposiciones en el país.
Entre las pocas y más recientes inauguraciones destacamos aquellas que se producen de manera individual y por partida doble en la galería Luisa Strina; o el también solo show en la Galería Nara Roesler de uno de los más interesantes artistas emergentes brasileños, que, además, sirve para reinaugurar la programación 2020 de la galería.
Date es un artista cuyos datos biográficos se desconocen en gran medida. La muestra "Strange How Things Work Out" presenta el trabajo de esta enigmática figura por primera vez en un escenario público, la Galeria Luisa Strina, de Sao Paulo.
Se trata de un solo show organizado por el artista mexicano Mario García Torres (Monclova, 1975), quien a principios de la década de 2000 dejó de fechar sus obras; al hacerlo, socava la narrativa de una obra y una carrera como evolución progresiva en el tiempo. n.d. (no date) suele acompañar, desde entonces, al título de sus obras, y se ha convertido en una firma del artista.
García Torres es uno de los artistas latinoamericanos más reconocidos internacionalmente. Ha utilizado diversos medios, incluidos el cine, el sonido, la performance, las "instalaciones museográficas" y el video como medio para crear su arte. García Torres a menudo menciona historias no contadas o "menores", con una predilección por el arte y la música de vanguardia de las décadas de 1960 y 1970, como puntos de partida de su obra. Ha recreado exposiciones históricas e incluso ha "completado" obras de arte inacabadas, a menudo difuminando el original y la recreación, el pasado y el presente, mientras cuestiona las ideas universales sobre la verdad, la certeza y el tiempo, todas son ideas centrales en el desarrollo de su obra.
Con el misterio desvelado y sin dejar la galería Luisa Strina, ya que en ella también se inaugura una muestra individual con dibujos y esculturas nunca mostradas en Brasil de Lucia Nogueira (Goiana, 1950 - Londres, 1998), artista brasileña que vivió en Londres desde la década de 1970 hasta el final de su vida.
A lo largo de su breve pero notable carrera, Nogueira creó un poderoso cuerpo de trabajo multidisciplinario. Centrada principalmente en esculturas e instalaciones que se hicieron famosas por el uso de materiales banales combinados de una manera única y asombrosamente precisa, su trayectoria está marcada por la práctica constante del dibujo.
Organizada en colaboración con la Anthony Reynolds Gallery, de Londres, esta exposición presenta una serie importante que no integró las retrospectivas realizadas después de la muerte prematura de la artista: Drawing Room, Londres, 2005; Museo Serralves, Oporto, 2007; Kettle's Yard, Cambridge, 2011]: "Inferno - Divine Comedy (1983)", compuesta por 14 dibujos realizados con lápiz, carboncillo y acuarela, que retrata la visión muy particular de la artista sobre un tema que ha interesado a artistas a lo largo de la historia, desde Botticelli, Michelangelo, Delacroix, William Blake y Gustave Doré, hasta Rodin, Dalí, Robert Rauschenberg y Alfredo Jaar.
Según Gabriel Pérez-Barreiro, quien dedicó una sala especial a la artista en la 33° Bienal de São Paulo (2018), argumentando que a partir de entonces se podría crear una nueva relación con la historia del arte brasileño reciente, "en sus obras, la artista utiliza objetos cotidianos para crear una inquietante sensación de suspensión y extrañeza. Al combinar y confrontar muebles, cajas, tubos de plástico y vidrio, evoca diálogos misteriosos y cautivadores, que parecen ofrecer más preguntas que respuestas. Como brasileña residente en Londres, habla de la noción de desplazamiento y las preguntas que resultan de vivir en una cultura diferente, una situación en la que lo cotidiano y lo obvio pueden volverse desconcertantes. Quizás porque es consecuencia de este desplazamiento, el lenguaje es un referente central en sus obras; los títulos en inglés suelen jugar con dobles sentidos y la idiosincrasia de los términos gramaticales del idioma".
Desde hace tan solo unos pocos días antes, en la Galeria Nara Roesler, de São Paulo, también se puede visitar "Virá", una presentación individual del joven artista brasileño Bruno Dunley (Petrópolis, 1984) con una selección de sus pinturas y obras en papel más recientes. La muestra reinaugura la programación 2020 de la galería.
Según Luis Pérez-Oramas: "Bruno Dunley es pintor: es un protagonista esencial en medio de la joven generación de pintores brasileños cuyo trabajo ha cobrado protagonismo a principios del siglo XXI. La complejidad y riqueza de su obra, su variedad y consistencia, se destaca singularmente entre los artistas emergentes de este siglo".
La Galeria Nara Roesler tiene pensado compartir una publicación digital con fotografías de una selección de obras producidas por el artista entre 2018 y 2020, junto con nuevos contenidos críticos sobre su práctica. La publicación estará disponible en las plataformas digitales de la galería para lectura en línea y/o descarga gratuita.
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