La colección de arte privada de Iberdrola, premiada por ARCO, llega a Madrid

La Colección Iberdrola será protagonista de dos acontecimientos a lo largo de esta semana. Por un lado, recibe, este miércoles, 25 de febrero, un Premio ARCO, en reconocimiento al Coleccionismo Corporativo, y por otro, tan solo dos días después, en el CentroCentro - Palacio de Cibeles de Madrid se abre al público, la exposición itinerante "La Piel Traslúcida", que bajo el comisariado de Javier González de Durana, muestra, por primera vez, en Madrid, 67 obras de la Colección Iberdrola con especial énfasis en su sección de fotografía contemporánea.

En cuanto al primero, según la Fundación Arco, "la colección pone de manifiesto el compromiso de Iberdrola con el mundo del arte y es un ejemplo de la labor de mecenazgo que desarrolla como empresa socialmente responsable y sostenible, apoyando tanto acciones que conservan el patrimonio del pasado como las que promueven las formas de expresión artística que, desde nuestro tiempo, nos dan las claves del futuro". Además, la concesión de este reconocimiento responde, según la Fundación, al "cuidado en la selección de los artistas y las piezas, así como su instalación en un entorno empresarial que permite el acceso a empleados y visitantes".

Por lo que respecta, al segundo, según Javier González de Durana, comisario de la exposición: "La selección concreta realizada para su presentación en CentroCentro indaga sobre dos aspectos paralelos, pero complementarios. En un sentido concreto y real, la dermis como órgano que desde la superficie corporal comunica profundos sentimientos y estados de ánimo, de una parte. Y en un sentido amplio y metafórico, el arte como piel-signo que esconde un cuerpo-significado que el observador debe desentrañar a la vista de aquella desde su experiencia y conocimiento personales -esto es, desde su propia piel-, de otra parte".

Así, pues, de la primera parte de la colección, que abarca desde los comienzos de la modernidad artística en el País Vasco hasta la mitad del pasado siglo XX, se presentan sólo 2 piezas ligadas a los movimientos post-impresionistas y vanguardistas. El grueso de la muestra, lo conforman 29 obras que testimonian la evolución del arte español desde 1957 hasta la actualidad y otros 35 trabajos más recorren la fotografía internacional desde los años 70 hasta nuestros días -incluídos fotógrafos españoles-.

Se trata de una cuidada selección que incluye obras de Eduardo Chillida, Miquel Barceló, Jorge Oteiza, Antoni Tàpies, Antonio Saura, Antonio López, Gerard Richter, Robert Mapplethorpe o Cy Twombly, entre otros destacados artistas.

La Colección Iberdrola ha ido creciendo a lo largo del tiempo ligada al propio desarrollo histórico de la corporación, aunque ha sido en los últimos siete años cuando ha tenido un importante impulso, habiéndose reordenado y ampliado considerablemente.

Cuenta con un primer bloque de obras de arte vasco de finales del siglo XIX y principios del XX con pinturas de Regoyos, Iturrino, Zuloaga, Zubiaurre, Maeztu o Ucelay, entre otros, a la que sigue una segunda sección formada por obras de artistas españoles desde 1957 hasta la actualidad con obras de Oteiza, Chillida, Tapiès, Saura, Palazuelo o Antonio López, entre otros muchos.

A partir de 2001 la colección se abre a artistas internacionales y a otros medios como la fotografía y el vídeo, con piezas de Gerhard Richter, de representantes de la Escuela de Düsseldorf y de autores como Cy Twombly, Cindy Sherman, Richard Prince, Robert Mapplethorpe, Francesca Woodman, Wolfgang Tillmans, Hiroshi Sugimoto, Shirin Neshat, Mona Hatoum, Gabriel Orozco, Vik Muniz, Willie Doherty o Luisa Lambri, entre otros.