Gabriela Cendoya Bergareche deposita su colección de fotolibros en el Museo San Telmo

La historiadora del arte y coleccionista vasca Gabriela Cendoya Bergareche (San Sebastián, 1958) ha firmado un acuerdo de comodato con el Museo San Telmo, por el cual, su colección personal de fotolibros, compuesta por unos 1.400 volúmenes, será gestionada por el Centro de Documentación y Debate del museo donostiarra.

El objetivo princial de este acuerdo entre la coleccionista y el museo responde "a la voluntad de la propietaria de hacer más visible la colección y ponerla a disposición del público, objetivo compartido por San Telmo, que se compromete catalogar la colección, así como a poner los medios necesarios para su conservación y a ponerla a disposición del público", señala la nota emitida.

El acuerdo fija también "que la cesión se realiza con el compromiso de que el museo enriquezca la colección y desarrolle una programación, para lo cual contaría con el asesoramiento de Gabriela Cendoya y un equipo de asesores, encaminada a profundizar en el conocimiento del estado actual y del futuro desarrollo de la fotografía. La programación de esas actividades se elaborará y consensuará con un grupo de colaboradores de la profesión, que apoyan esta iniciativa y que participarán en el asesoramiento de la redacción de programas y propuestas concretas", prosigue la nota.

La colección Gabriela Cendoya Bergareche "refleja de modo fiel este momento especial que se ha llegado a llamar el 'boom' del fotolibro en el trabajo editorial y creativo de autor y actualmente es una de las más completas referidas a este periodo que puede encontrarse, ya que entre sus 1.400 volúmenes reúne una parte importante de las publicaciones tanto nacionales como internacionales de este periodo en el campo de la fotografía y la imagen en general", aclara el comunicado.

El gran componente internacional y ecléctico de la colección tiene que ver con que Gabriela Cendoya pasa toda su juventud en la región de Burdeos, donde estudia historia del Arte, y sigue teniendo un pie allí y otro en Hondarribia, donde reside actualmente. Esta doble cultura ha influido mucho en su manera de ser y en las características de la colección.

A nivel estatal la colección "cubre una gran parte del panorama actual y de estos últimos años, en los que muchos jóvenes fotógrafos se daban a conocer fuera del país y ganaban importantes premios, y recoge los principales libros publicados en este ámbito, mientras que en un nivel más cercano, sí es exhaustiva en cuanto a la representación de los trabajos editados por autores vascos. La colección también incluye publicaciones de ediciones internacionales. Así, por ejemplo, se ha ido aumentando la parte de libros japoneses, con muchas publicaciones de pequeña tirada o autoediciones, con autores hoy reconocidos y cuyos libros no son fáciles de encontrar o se encuentran agotados. Y siguiendo siempre de cerca la actualidad en EE.UU. y Europa, en la medida de lo posible", concluye el comunicado.

Todo aquel que ande metido en este campo ha visto como la última década ha sido clave en la evolución del llamado "boom" del fotolibro o photobook. Si bien ya existían importantes libros de fotografía antes de estos años -y esta colección dispone de algunos de ellos-, en esta última época se ha producido una explosión del "fenómeno" del fotolibro, con muchas autoediciones y creación de nuevas editoriales, ferias especializadas y exposiciones monográficas, tanto a nivel nacional como internacional.

Centrándonos en España, dan buena prueba de ese fenómeno, el surgimiento en los últimos años de distintas ferias, entre ellas, la barcelonesa ArsLibris, que acaba de celebrar su octava edición en el Arts Santa Mònica, de Barcelona. Además, se han podido ver varias exposiciones dedicadas al fotolibro en centros y museos españoles.

De hecho, actualmente, se puede visitar "Fenómeno Fotolibro", la primera muestra de la nueva etapa de la Fundació Foto Colectania, de Barcelona, que se divide entre su nueva sede y el Centre de Cultura Contemporània de Barcelona (CCCB). La exposición reivindica el valor del fotolibro en la cultura visual contemporánea y propone una reinterpretación de la historia de la fotografía a través del fotolibro y de la fotografía impresa. Y lo hace desde la mirada de nueve comisarios internacionales expertos en la materia: Gerry Badger, Horacio Fernández, Ryuichi Kaneko, Erik Kessels, Martin Parr, Markus Schaden, Frederic Lezmi, Irene de Mendoza y Moritz Neumüller, que ha sido el comisario ejecutivo de todo el proyecto.

Reivindicar el valor del fotolibro es lo que persigue igualmente la colección Gabriela Cendoya Bergareche, quien por afición empezó a comprar libros de Arte, de pintura contemporánea o fotografía, hasta llegar en los últimos 12 o 15 años a interesarse y comprar casi exclusivamente libros de fotografía, formando su extensa colección.

Su pasión desbordada por el mundo del fotolibro la ha llevado a que, desde marzo de 2015, también abriese un blog sobre libros de su colección llamado Fotolibros y algo mas.