Entrevistas 17 abr de 2020
por ARTEINFORMADO
Eugenio Viola. Fotografía Camo, Bogotá. Cortesía del MAMBO
"Los museos e instituciones culturales tendrán que enfrentar nuevos problemas nunca antes experimentados".
"Nos veremos obligados, más que nunca, a concebir continuamente nuevas estrategias para involucrarnos cada vez más con nuestras comunidades, y atraer siempre nuevos públicos potenciales".
Dentro del proyecto informativo colaborativo de reflexión sobre el futuro del arte y nuestra sociedad (#pensandoelfuturo / #pensandonofuturo), nacido en plena lucha contra la crisis del coronavirus, presentamos esta nueva entrevista con Eugenio Viola, curador jefe del Museo de Arte Moderno de Bogotá (MAMBO), y que, como el resto publicadas y/o por publicar, ARTEINFORMADO ofrece en abierto para que sigamos "todxs en casa pero todxs bien informadxs":
ARTEINFORMADO (AI): En estos momentos de incertidumbre, ¿qué mensaje de ánimo y de confianza le gustaría trasladar a todos los operadores y actores del mundo del arte?
Eugenio Viola (EV): Mi mensaje de apoyo está articulado en diferentes puntos. En primer lugar, debemos reconocer que esta situación está afectando a todos los actores del sistema de arte, en todos los niveles. TODOS estamos en el mismo barco, afrontando nuevas e imprevistas dificultades que antes desconocíamos, relacionadas directamente con la actual pandemia y sus consecuencias. Por lo tanto, tenemos que ser cohesivos para enfrentar este incómodo momento juntos, y es necesario promover nuevas formas de solidaridad entre los diferentes actores del arte. Debemos idear estrategias y plataformas compartidas para cooperar de manera proactiva, con el objetivo de encontrar nuevas formas de trabajar juntos. El arte siempre ha reaccionado en tiempos de crisis, sacudiendo y despertando la sensibilidad común. El arte tiene la capacidad paradójica de jugar entre la catástrofe y la comunicación, mientras que los artistas interpretan -y a veces predicen- el presente a través de su observación del mundo. El arte no puede resolver la crisis, pero puede enfrentarla a través de su lente crítica. El arte nos da la posibilidad de experimentar perspectivas diferentes y más amplias, capaces de desafiar nuestra percepción habitual de la realidad para compartirla con nuestras audiencias. Y es para todos nosotros, los que estamos involucrados en el mundo del arte, tanto una responsabilidad social como un privilegio.
AI: ¿Cómo cree que va a cambiar el sistema del arte, en general, y el museístico, en particular, a partir de ahora, en lo referente a gestión, exhibición, relaciones con otros profesionales y comunicación? ¿Toca reinventarse?
EV: Cambiará, sin duda, pero creo que aún es demasiado pronto para predecir qué tan radical será este cambio. Todavía no sabemos cómo será la vida después de salir de nuestro aislamiento. La pandemia ha cancelado repentinamente nuestra forma de vida, forzándonos a pasar de un mundo socializado a uno segregado. El virus ha impactado la salud de nuestras comunidades, ha transformado la forma en la que trabajamos y nos comunicamos, ha aumentando la incertidumbre en la economía global, y ha cambiado rápidamente la forma en que producimos, compartimos y consumimos cultura. Esta situación ya impuso a todos a reconsiderar la relación que tenemos con el mundo externo. Seguramente esta pandemia también cambiará la forma en la que tratamos con el arte e influirá en todo el sistema artístico. Los intelectuales ya han comenzado a elaborar nuevos modelos teóricos, y los artistas a orientar su investigación hacia los cambios y pérdidas que hemos tenido, documentando los fallos significativos de liderazgo, tecnología y sociedad que estamos presenciando, en todas partes y en todos los niveles.
Los museos e instituciones culturales tendrán que enfrentar nuevos problemas nunca antes experimentados. Cuando tengamos la posibilidad de abrir nuestras puertas nuevamente al público, las coreografías y liturgias relacionadas con el cuerpo, así como el ritual del mundo del arte (al menos a corto y medio plazo), habrá cambiado radicalmente. Nos veremos obligados a respetar una serie de reglas de seguridad y distanciamiento que afectarán todas nuestras actividades habituales. Los museos e instituciones culturales tendrán que reconsiderar, por ejemplo, su forma de concebir inauguraciones, eventos, charlas, proyecciones, etc. Tal vez, debido a todas estas contingencias tendremos que reinventarnos, y seguramente, tendremos que personalizar nuestras instituciones a un nuevo entorno y a nuevas coyunturas mientras estimulamos a nuestros públicos a que vuelvan progresivamente. Nos veremos obligados, más que nunca, a concebir continuamente nuevas estrategias para involucrarnos cada vez más con nuestras comunidades, y atraer siempre nuevos públicos potenciales.
Por último, pero no menos importante, la mayoría de las instituciones en todo el mundo enfrentarán una mayor escasez económica y severos recortes en sus presupuestos. Desde que cerramos, hemos experimentando una pérdida masiva de entradas, venta de libros y regalos, visitas guiadas y eventos privados. Los gobiernos también enfrentarán graves dificultades económicas; tendrán que ayudar a otros sectores de la sociedad a los que seguramente serán priorizados. Es un gran error, pero tradicionalmente, cultura y educación son siempre los primeros capítulos que se eliminan de la agenda política en tiempos de crisis; sin considerar que con la crisis financiera será aún más difícil atraer patrocinadores privados. Ya he escuchado de muchos colegas tonos apocalípticos sobre el futuro del arte y la cultura que no quiero aceptar por completo, pero esta situación inevitablemente afectará el programa de las instituciones: exposiciones temporales, pero también políticas relacionadas con colecciones, así como a los programas educativos y públicos.
AI: ¿Alguna vez pensó que su organización necesitaría de un plan de contingencia online para crisis?
EV: Al igual que todas las otras instituciones en el mundo, tan pronto como cerramos, el MAMBO estableció una "unidad en crisis", creada entre los diferentes departamentos del Museo, para estudiar nuevas estrategias, con el objetivo de estar activos y "vivos" incluso con nuestras puertas cerradas al público. Se suponía que nuestras próximas inauguraciones tendrían lugar el 19 de marzo (el colombiano Fernando Arias) y el 27 de marzo (el padre del arte del performance australiano Mike Parr). Pudimos instalar y montar las exposiciones, pero no pudimos abrirlas al público. Eso conllevo a la idea de enfocarnos en nuestras plataformas digitales. Tuvimos que crear y proporcionar no solo contenidos innovadores, sino también materiales educativos e interactivos que podrían tener un valor en la vida de nuestros usuarios electrónicos, analizando lo que podrían necesitar o disfrutar en este momento particular.
Lanzamos cinco campañas digitales, centradas respectivamente en: 1) La Colección del Museo: Concebimos y compartimos diferentes miradas curatoriales dentro de nuestra colección (que incluye más de 4.700 obras de arte), y creamos algunos contenidos exclusivos relacionados con el programa expositivo del 2020. También lanzamos un concurso en línea para invitar a nuestro público a interactuar y reinterpretar algunas piezas icónicas de nuestra colección. 2) Hemos recomendado algunas lecturas y regalos de nuestra Tienda MAMBO, para apoyar a los autores y diseñadores cuyas creaciones hacen parte de nuestra tienda. Además, estamos haciendo una serie de videos, llamados "En Casa de ..." con videos y charlas en vivo en los talleres y estudios de algunos de estos diseñadores. 3) Dialoga con el Equipo MAMBO: este proyecto busca ofrecer otra mirada del Museo a través del lente de nuestro equipo. Estamos haciendo algunos videos sobre las tareas que realiza cada uno de los miembros de los departamentos del MAMBO, para comprender cómo funciona un museo "detrás de escena" y para acercar a nuestros usuarios electrónicos a nosotros. 4) Hemos creado algunos contenidos personalizados relacionados con las próximas exposiciones, que tuvimos que posponer hasta nuevo aviso. Organizamos, por ejemplo, una apertura en línea de la exposición Nada que cesa de Fernando Arias, que podrán encontrar en todas nuestras redes y plataformas digitales. Todos los jueves tendremos un video en vivo a las 6:00 p.m. para discutir temas de arte y dar un espacio de conversación entre los artistas, el equipo y el público. 5) Yoga y arte en casa. Todos los domingos a las 10am.
Esto es solo un vistazo de nuestras actividades en línea, y vendrán muchas más en nuestras redes sociales y canales digitales. Diferentes acciones, destinadas a utilizar nuestros canales sociales para compartir ideas y ayudar a conectar a las personas a través del arte. Seguiremos trabajando en este sentido. Nuestro objetivo es contribuir lo mejor que podamos para transmitir esperanza y optimismo a nuestro público.
AI: ¿Piensa ahora que deberían acometer una nueva fase online? Si, es así, ¿qué medidas barajan implementar de cara al futuro en su nueva estrategia digital y que no venían ejecutando?
EV: Actualmente estamos reestructurando nuestro sitio web, pero esto es algo que planeamos desde antes de la emergencia, y ya hemos aumentado nuestra presencia en redes sociales, como mencioné en mi respuesta anterior.
Sin embargo, todas las instituciones del mundo conciben estrategias desmaterializadas similares, que corren el riesgo de volverse demasiado autorreferenciales. Ya estamos dramáticamente sumergidos por exhibiciones en línea, inauguraciones en línea, visitas y recorridos virtuales, entre otros. Esfuerzos masivos totalmente válidos para mantener vivas las instituciones, pero que corren el riesgo de abrumar a los visitantes electrónicos. Por esta razón, estamos tratando de concebir estrategias alternativas.
En estos tiempos de crisis, el MAMBO siente la necesidad de llegar a una comunidad más amplia, más directa y proactivamente. Creemos que es vital que los museos y las instituciones culturales conciban estrategias capaces de difundir un mensaje más allá de sus muros institucionales, pero no solo en el hipertexto virtual sino a través de las personas y dentro del entorno metropolitano. Por esta razón, concebimos un proyecto urbano que el MAMBO está lanzando por Bogotá. Invitamos a algunos artistas colombianos destacados a responder, a través de su obra, al actual e incierto escenario, marcado por una crisis generalizada, la pandemia, la cuarentena y el aislamiento. Los artistas respondieron con un statement, que también puede incluir letreros, dibujos, imágenes; y fue concebido para ser reproducido a escala urbana (en carteles y vallas publicitarias). Creemos que el arte, sobre todo, debe ocuparse del lenguaje y la comunicación. Como curador, creo firmemente en la ósmosis entre el interior y el exterior de la institución; siempre estoy interesado en trabajar en proyectos que puedan alcanzar una escala urbana. Según mi experiencia, estas estrategias pueden ser muy beneficiosas para llegar a personas que generalmente no pertenecen a nuestro público general o al público experto, que navega hábilmente en Internet.
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