Dentro del proyecto informativo colaborativo de reflexión sobre el futuro del arte y nuestra sociedad (#pensandoelfuturo / #pensandonofuturo), nacido en plena lucha contra la crisis del coronavirus, presentamos esta nueva entrevista con el artista, activista y teórico Daniel G. Andújar (Almoradí, Alicante, 1966) y que, como el resto publicadas y/o por publicar, ARTEINFORMADO ofrece en abierto para que sigamos "todxs en casa pero todxs bien informadxs":

ARTEINFORMADO (AI): En estos momentos de incertidumbre, ¿qué mensaje de ánimo y confianza le gustaría trasladar a sus colegas y al resto de los operadores y actores del mundo del arte?

Daniel G. Andújar (DGA): Estamos viviendo una distopía que ojalá sea breve y transitoria. Generaciones anteriores a la nuestra han hecho frente a los tremendos desafíos que se les ha planteado a través de la historia. Ahora no va a ser diferente, el Arte, la Cultura, la sociedad en general, afronta un desafío necesario y fundamental. Esto pasará y, también los artistas, seremos necesarios para intentar convencernos que sólo un cambio radical puede salvarlos de un mundo que cada vez está más estandarizado, normalizado, mediatizado y controlado que necesita urgente de una reorganización.

AI: ¿Cómo cree que va a afectar a su manera de trabajar y a su obra así como a sus relaciones con el resto de operadores? ¿Toca reinventarse?

DGA: La práctica artística debe de estar en permanente estado de alarma, en perturbadora emergencia que obliga a reinventarse continuamente. La desestabilización, el aislamiento social con graves limitaciones de los movimientos, la hiperconectividad de nuestras cápsulas de confort, la suspensión del funcionamiento habitual de las condiciones de vida y de trabajo de muchos y en muchas regiones, acelerará algunos procesos derivados de la globalización y la digitalización puestos en marcha desde hace décadas. Incluso procesos ideológicos que estaban latentes en nuestras sociedades. Puede que muchas cosas cambien para siempre, o durante un largo periodo de tiempo. Y sí, tal vez esos cambios afecten a la reinscripción de las obras de arte en el contexto. Nada nuevo en el contexto histórico, me gusta recordar a Kazimir Malevich, en su ensayo «Sobre el museo», de 1919, alentado al estado soviético a que destruyera los antiguos museos y colecciones de arte rusos, ya que su destrucción podría abrir el camino del arte vivo y auténtico. Los retos son importantes y la práctica artística deberá estar ahí creando un espacio radical de libertad y resistencia que genere una necesaria capacidad crítica en el público y la sociedad.

AI: ¿Piensa ahora que debería acometer una nueva fase online para visibilizar y difundir más y mejor su trabajo u otros proyectos impulsados y relacionados con él? Si, es así, ¿qué medidas baraja implementar de cara al futuro en su nueva estrategia digital y que no venía ejecutando?

DGA: En 1994 fundé Technologies To The People™, pronto aparecieron los primeros proyectos en Internet, los primeros dominios, las primeras comunidades, los primeros trabajos en red. También los primeros fracasos y las pérdidas de espacio público, libertad y autonomía para artistas y sociedad en general. En 25 años la burbuja digital pasó de una expansión vírica a una explosión controlada que dejó en manos de unos pocos las llaves del castillo. En estos 25 años he desinflando mi “estrategia digital”, cerrando foros, webs, blogs, abandonando dominios, plataformas y redes. Ahora operamos donde nos dejan, generalmente en espacio privativos, un espacio que tras esta crisis será todavía más diminuto y bajo leyes y normas más estrictas. Haremos lo que podamos.