Descripción del Artista
Llega exiliada a México en 1939 con su familia, Deutsch Reiss, austriacos judíos escapando de la persecución nazi. En México ingresa a la Cruz Roja y hace una carrera de enfermería por la mañana mientras por la noche asistía una escuela secundaria nocturna para trabajadores en la colonia Santa María. Cuando logró recuperar el nivel de estudios de bachillerato que tenía antes de exiliarse, ingresó a la Universidad Autónoma de México para estudiar medicina. Trabajó en un laboratorio de análisis médicos en el antiguo Hospital Americano. Más tarde montó su propio laboratorio que terminó por donar a sus trabajadores cuando ella se ocupaba más y más por recorrer el país y promover las artes populares.
A su padre le fascinó la arqueología desde el momento en que llegaron: ambos leían acerca de un sitio y luego dedicaban un fin de semana a visitarlo, aunque ello implicara subir un gran cerro para encontrarse tan sólo con un muro medio derruido. Durante las vacaciones realizaban viajes más largos; a veces los hacían a lomo de mula o en avioneta, pues en ciertos sitios estas eran las únicas vías de acceso. En muchos lugares, además de los vestigios arqueológicos, había milpas, poblaciones, indígenas y mercados, a los cuales Ruth se sintió atraída.
"Empecé comprando artesanías, porque me gustaban, de acuerdo con lo que podía adquirir, objetos chiquitos de cerámica. En el apartamento en que vivíamos mis papás, mis hermanos y yo sólo había un estante. Además, no tenía un gusto definido, apenas estaba descubriendo esta cultura. Cuando compraba textiles era, principalmente para usarlos." Entonces, Ruth no tenía idea de lo que era un tejido de telar de cintura, pero sí podía admirar una blusa bordada. Con el aprendizaje del arte detrás de esas piezas se acentuó su apreciación por la maestría técnica de las tejedoras y, hasta sus últimos días solía vestirse frecuentemente con textiles indígenas.
En 1956 su familia se muda al Edificio Condesa. En el apartamento dispuso de una pared de la sala, más el cuarto destinado a ella. Cuando su hermano se marchó a estudiar y se casó, ella pudo disponer por completo de la casa. Las fiestas populares le empezaron a interesar más que los sitios arqueológicos y esto le dio nuevos motivos para viajar. Comenzó a adquirir máscaras, dado que ahora contaba con sitio para exhibirlas y no tendría que guardarlas en un armario.
En 2003 la Dra. Lechuga recibió un emotivo homenaje en la Embajada de Austria en México, donde fue condecorada por el gobierno austriaco.
Exposición. 19 nov de 2024 - 02 mar de 2025 / Museo Nacional del Prado / Madrid, España
Formación. 23 nov de 2024 - 29 nov de 2024 / Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS) / Madrid, España