Artista

Alexander Hernández Chang

1987 en Sancti Spíritus, Sancti Spiritus, Cuba

Datos generales
Sin Algoritmo AI

Residencia:

Reside en Sancti Spíritus, Sancti Spiritus, Cuba

Galerías y otras organizaciones que le representan:

ARCH-Always on Target

Etiquetas:

Acrílico Arte chino Arte contemporáneo Arte cubano Cerámica Escultura Instalación Objeto intervenido Oleo sobre lienzo Pintura Técnica Mixta

Documentos relacionados:

Dossier Alexander Hernández Chang
pdf

C.V. Alexander Hernández Chang
pdf

Anexo bibliografía curricular online Alexander Hernández Chang

Enlaces oficiales:

Web Facebook Instagram

Descripción del Artista

Me identifico en mis obras con los símbolos de la Identidad como fenómeno sociocultural ha marcado mi proceso de creación desde la experiencia como descendiente del linaje chino. Esta suerte me ha posibilitado investigar y experimentar disímiles formas de hacer desde el dibujo, la pintura, la escultura, el grabado y otros medios expresivos. Mi obra se nutre de ese fluido universal de símbolos, íconos, estéticas, conceptos y sincretismo religiosoque manifiestan estas culturas, intentando captar lo esencial de ambos sistemas denotativos del imaginario popular. En las representaciones aparece la figura humana como homenaje a esos hombres y mujeres de diversas procedencias, protagonistas de una migración forzada, herederos de culturas donde lamagia y religión estaban estrechamente liadas. Ellos compartieron en lo rural y urbano: barracón, cañaveral o ingenio; sin saber, en gran medida, que el mayor patrimonio consiste en la aparición de una nueva ascendencia cultural. China y Cuba, dos naciones que, sin habérselo propuesto, terminaron ... por ser parte la una de la otra. Colores representativos se muestran en cada una de las piezas justificando esa añoranza por los orígenes. Una poética particular que tiene su génesis en el sustrato cubano-chino, de raigambre familiar. Como propuesta visual me interesa lograr una comunicación directa obra-espectador, enriqueciendo el conocimiento sobre nuestro ajíaco identitario.