Es una obra donde el cuerpo físico martirizado ya no existe, sólo queda el vestido
vacío, como intervalo entre presencia y ausencia, exterior e interior, materia y
energía. El color blanco es símbolo de paz, transformación y sublimación espiritual
del dolor, no hubo piedad, Piedad está ausente, se ha ido y vuela hacia arriba, su
luz se eleva mientras su sombra desciende.
Volar lejos, muy lejos no con el cuerpo físico, sino con los cuerpos mental y
emocional (astral).
¿Te gustaría añadir o modificar algo de esta obra?
Infórmanos si has visto algún error
en este contenido o eres este artista y quieres actualizarla. ARTEINFORMADO te agradece tu aportación a la comunidad del arte.