MARUJA MALLO Tu vacío es mi ausencia, tu memoria es mi presencia Monica Mura
2017 Espejo styroglass, pigmentos y pan de oro) Instalación Díptico 50 x 50 cm c.u. + Luz (reflejo medidas variables)
50 x 100 x 1 cm
La mujer sigue condenada al olvido, como si fuera culpable del crimen más grave de la antigua Roma, se le aplica su especial «Damnatio memoriae» (condena a la memoria), que se situaba en la cúspide de los castigos más crueles. La mayoría de las mujeres, más del 50% de la sociedad, ha sido condenada, a ser borradas de cualquier forma de recuerdo. Las supervivientes a este trato, han sido escasas y demasiadas veces vienen recordadas de manera marginal o anecdóticas.
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CRÉDITOS: Proyecto "Pre(au)sencia": Todas y todos somos huérfanos de la Historia, porque sin las biografías de las mujeres que han vivido y luchado antes de nosotros, no podemos hacer tesoro de sus experiencia