... en esta pintura, es el gesto, el incisivo, duro, cruel trazo que lo construye. Un "gestualismo" no automático sino, animado, dirigido por una pasión feroz de esclarecer actitudes anímicas. La pintura de Eduardo Roldán es una despiadada galería de retratos. La grafía de esta obra, nerviosa, hiriente y agresiva, responde a la tensión vital y rítmica, no solo del brazo inseparable de los tubos o el pincel, sino del ser total y apasionado del artista." Eduardo Roldán por Julián Casado