Descripción de la Exposición Este proyecto que se engloba bajo el titulo genérico de: "Y LOS LLAMAMOS ÁNGELES CAÍDOS" se plantea como una reflexión acerca de la naturaleza del mundo del arte, sus mitos y sus perversiones. Tomando como punto de partida el concepto de ángel caído pretendo realizar un grupo de obras donde se recree la mitología trágica de la historia del arte contemporáneo. Estas obras, entendidas como simulaciones dramáticas o incluso parodias de las grandes tragedias del arte, enlazarían con la tradición clásica de los cuadros de historia, mostrándonos todo un repertorio no ya de grandes gestas sino de grandes fracasos, frustraciones y amarguras. Algo así como la recreación contemporánea de la figura del artista romántico, inevitablemente ligado a su destino fatal así como a lo doloroso de su actividad creadora. El concepto central del proyecto se organiza en torno a una idea muy elemental: La representación realista de las muertes trágicas de algunos de los artistas más importantes del siglo XX. Entendiendo representación como la reconstrucción plástica más o menos fiel de unos hechos históricos determinados y tomando la tragedia como un vehículo emocional que nos permita conectar con la esencia del mito. Es decir, que nos ayude a reflexionar acerca de lo que antes denominábamos ángeles caídos, lo que sus leyendas tienen de fantasía y realidad y en qué medida la propia historia tiene la capacidad de diluir el estrecho margen existente entre ambas. Para ello pretendo recrear unos escenarios donde se nos muestre, de la forma más verosímil y realista posible, la muerte de artistas como Pollock, Rothko o Basquiat, muertes eminentemente trágicas y que de una manera u otra han ayudado a cimentar las bases de sus propias leyendas. Estos escenarios se plantean como elementos de ficción donde reconstruir de manera personal la historia del arte, utilizando todos los medios para que esta ficción resulte creíble: los decorados, el vestuario, las actitudes de los personajes y los encuadres de las imágenes deben servir para crear una imagen que nos permita visualizar de la manera mas veraz posible estas puestas en escena. Mediante lienzos de gran formato y utilizando una técnica de figuración realista pretendo mostrar al espectador unas imágenes que materialice su curiosidad más morbosa, utilizando el imaginario mitológico popular como una base de datos desde la que se organice y alimente la construcción de estas imágenes. Para que estas ficciones resulten eficaces deben estar construidas como un sistema entrelazado de signos visuales que ayuden al espectador a identificar al protagonista por si mismo, valiéndose únicamente de los mitos, fantasías y elucubraciones que rodean a la muerte de estos artistas y que inevitablemente se han convertido en una suerte de leyendas urbanas. Por ejemplo, en el caso de una de las obras en la que se representaría la muerte del pintor americano Jean-Michel Basquiat en 1988 a causa de una sobredosis por heroína (ver fig.1), se nos mostraría una panorámica de un amplio estudio, repleto de las obras del propio Basquiat amontonadas en paredes o desperdigadas por el suelo. Y en medio de este caos una figura vestida y peinada del mismo modo del artista yace en el suelo con una jeringuilla hipodérmica clavada en el brazo. El rostro del artista no seria visible, pero el resto de la composición nos daría las pistas suficientes para identificar y entender la situación que se representa, lo cual convertiría a estas obras en una suerte de acertijos visuales donde se mezclan la historia, la leyenda y la puesta en escena. Este concepto de puesta en escena es uno de los aspectos mas importantes a la hora de idear y construir estas piezas, ya que todas ellas requieren un trabajo de "maquillaje" previo: los escenarios, el vestuario y el atrezzo deben ser lo suficientemente realistas para que la ficción que se represente sea eficaz. Lo mismo ocurriría con la iluminación, el encuadre y, como no, con la disposición de los decorados. Todo deberá funcionar equilibradamente, sin un exceso de dramatismo ni violencia que convertirían a estas obras en simples farsas, pero utilizando así mismo todos los trucos visuales que sean necesarios para que el espectador disfrute con la representación. En cierta medida, este proyecto tiene mucho de cinematográfico, y tanto su planteamiento como su estructura son deudores de la estética de los biopicks americanos: producciones de alto coste donde se recrean las vidas de eminentes figuras de la historia, sean militares, artistas o asesinos en serie. El único patrón común de todas estas historias, es la utilización del drama como elemento esencial en la narración. La vida de estos héroes y antihéroes es convertida en un producto de ficción donde el sufrimiento, la muerte, la redención y el pecado aparecen como los motores de su propia existencia, forzándolos a vivir una vida gloriosa a la vez que miserable. Es este concepto del artista romántico, tantas veces aplicado a la biografía de grandes músicos, artistas o escritores, el que recoge la esencia de este proyecto, que se plantea como una reflexión acerca del universo mitológico del mundo del arte. El propio titulo del proyecto hace referencia a la creación artística como un proceso doloroso y traumático, que en cierta medida requiere una bajada a los infiernos. Los ángeles caídos de los que hablo no son más que los protagonistas de sus propios dramas, convertidos luego en héroes por la historia del arte. La existencia autodestructiva de artistas plásticos como Rothko, Soutine o Basquiat esta a la altura de los grandes mártires de la música popular del pasado siglo como son Jim Morrison, Lennon o Hendrix, y es que parece que el paradigma del artista como un ser obsesivo, de existencia traumática y final épico responde a un estereotipo todavía vigente dentro de nuestra sociedad. Desde la distancia que me ofrece el análisis histórico de la vida de estos artistas y tomando como punto de partida una actitud desapasionada y analítica pretendo crear un conjunto de obras donde plasmar todos los conceptos e ideas planteadas anteriormente. En cierta medida, se trataría de adoptar la personalidad de un falso voyeur que satisfaga las curiosidades del imaginario popular, ofreciéndonos recreaciones dramáticas de los aspectos más oscuros de sus propios mártires. Estas recreaciones a mitad de camino entre lo morboso y lo mitológico serían una versión actualizada de lo que comúnmente se denomina pintura de historia, algo así como un revival de un genero obsoleto, cercano a la propaganda y que se fundamenta en el uso negligente de la realidad histórica. Los protagonistas de las tragedias que quiero representar se identifican perfectamente con la estética del drama y el sufrimiento que ha predominado en el arte occidental durante siglos, ¿no son acaso Pollock o Modigliani paradigmas del concepto de artista maldito, mártires de la historia del arte como en otros tiempos lo fueron Gericault o Caravaggio? La materialización de este proyecto será la creación de 15 lienzos de grandes dimensiones que oscilen entre los 150 x 150 cm y los 200 x 300 cm. Estas obras serán realizadas en un periodo máximo de 6 meses, dentro del cual se realizarán: la construcción de los diferentes escenarios, la preparación del vestuario, mobiliario e iluminación, el trabajo de registro fotográfico y por ultimo la realización de las piezas en pintura. Cada una de estos obras reconstruirá una escena determinada que corresponde a la muerte, como ya he explicado anteriormente, de un conocido artista plástico. El objetivo final del proyecto es, por lo tanto, la creación de una serie cerrada de obras, con una relación temática definida y una estética similar, cuyo único objetivo es el de transmitir de la manera mas eficaz posible todos los conceptos desarrollados con anterioridad.
Exposición. 26 nov de 2024 - 16 mar de 2025 / Museo Nacional del Prado / Madrid, España
Formación. 23 nov de 2024 - 29 nov de 2024 / Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS) / Madrid, España