Xesús Vázquez, inicia su trabajo en los años 60; arranca con un carácter expresionista abstracto, a finales de los años 70, y es a comienzos de los 80 cuando se alza con una voz propia.

Participa del grupo "Atlántica", expone en numerosas galerías, Siboney de Santander, o Juana de Aizpuru en Madrid, salas y Museos; hasta la excepcional retrospectiva que le dedica el CGAC de Santiago de Compostela en el 2005.

En esta ocasión realiza una serie de obras pensadas para el espacio de la galería scq. Se trata de un conjunto de piezas de diferentes formatos. Una obra en la que el espacio se disloca, articulado por la geometría.

Consigue generar una libertada auténtica en el ejercicio de la pintura, una libertad ordenada, dirigida hacia ... un punto muy concreto donde el caos no tiene lugar. Una obra concebida desde la pintura y para la pintura.

El plano pictórico se convierte en una fina lámina, un elemento físico, un filtro de color que se superpone, aumentando su intensidad o se retuerce; de esta forma pasa Xesús Vázquez de la pintura a la instalación, cambia el material pero consigue expresar lo mismo. Las texturas, la luz, el lenguaje en definitiva tan personal de este pintor consigue una vez más reordenar nuestro espacio pictórico.