La historia de la fotografía esta próxima a los 200 años de vida pero es imprescindible, en primer lugar plantearnos, que a pesar de las tecnologías más modernas, en máquinas de fotografiar y procesos técnicos, el elemento que captura exactamente la realidad, como la ve el individuo es el ojo. Este principio que ahora parece algo olvidado, porque se cree que la técnica lo hace todo, es lo que la artista Marita Cort con un bagaje importante en el ámbito de la plástica, no pierde nunca de vista. Con su retina plena de imágenes, de personajes, países y situaciones, es infatigable por naturaleza, los últimos años ha volcado su saber y su oficio en realizaciones muy elaboradas fotográficamente, con las que prepara tres exposiciones con diferentes temáticas y conceptos.
La primera y actual exposición en ESPAI D'ART 32 de Pollença, Cort mantiene, unas veces de manera evidente y otras más velado,...un discurso que incluye a la mujer como personaje en primera línea o en segundo plano, de manera que pueden ser volúmenes que reconocemos como femeninos y en otros nos miran de frente. Especialmente interesante en el trabajo de Marita Cort, de esta exposición, es la cercanía que ella crea con los espacios y los objetos en los que unos y otros nos evocan hacia sillas diseñadas en los años 50, y a las intensidades de luz que influyen en los grandes espacios, veladuras o dibujos suaves que se intuyen inteligentemente y se relacionan con sentimiento. Perspectivas en escorzo que colaboran a un cierto misterio. Cort, sustrae de los recuerdos y las realidades, todo aquello que tiene sabor y alma para crear com- posiciones poéticas, entre ellas y los personajes.
Maria Jose Corominas
Entrada actualizada el el 10 oct de 2014
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