Inicio » Agenda de Arte

Visiones de Babilonia

Exposición / 9THE13 / Tabernas, 9 bajo / A Coruña, España
Ver mapa


Cuándo:
09 abr de 2010 - 09 jun de 2010

Inauguración:
09 abr de 2010

Organizada por:
9THE13

Artistas participantes:
Miguel Cuba Taboada

       


Descripción de la Exposición

Miguel Cuba Taboada nació en Lugo en 1982. Licenciado en Bellas Artes, ha ganado en 2009 el Premio Novos Valores de la Diputación de Pontevedra y, en 2008, el Premio adquisición de obra de la Fundación Laxeiro.

-------------------------------------------------------

-------------------------------------------------------

Ab urbe condita

La satisfacción de la expectación es un registro intelectual que se perfecciona comparando lo habitual, lo aprendido, lo catalogado y lo difundido (y propagado con su propaganda) con lo novísimo. Y esta satisfacción es ineludible en el Arte, sobre todo si los creadores más actuales favorecen ese destilado de la percepción que es el placer estético, y su significado y valor críticos.

Vehicular en la experiencia, Miguel Cuba Taboada vectoriza el choque de lo arracimado y babilónico (de ahí su referencia al sentido icónico de la Babel traspuesta, arruinada ya pero reconstruida desde la lanzadera de un Brueghel colosal; reinterpretada y rehabilitada a la manera urbano-cosmogónica de un mundo impulsado a la intemperie de las metrópolis) con la suavidad gradual de una atmósfera de cromatismo agnóstico que abandera el sobrevuelo por encima del magma edificado. Es la imagen conductiva de la referencia de nuestros paisajes monumentales viajados o ensoñados.

En el espectador visionario, se genera una disyuntiva racional: o se inspecciona y se busca en la niebla de la memoria (que es éter y claudica cuando se despierta) el yacimiento que le conseguirá lo extracorpóreo; o se cohabita con el futuro prospectivo que se desea y que teoriza nuestras raíces para adiarnos consecutivamente (ya Ph. O. Runge describió el acto de la contemplación como 'sentimiento de nuestra cohesión con el universo todo'). Si bien es cierto que el pintor pensaba en la estética, no lo es menos que nuestra vitalidad planificada nos induce y nos obliga a comprendernos en medios ciudadanos que amalgaman imprudentemente lo auténtico con interpolaciones internacionales que, si no nos universalizan, sí nos adocenan hasta saciarnos. A ello me refiero: esta exposición es la focalización de lo escénico sobre las tablas de un teatro viario que caminamos a diario, física o metafóricamente. 

Miguel Cuba reacciona ante la acción transnacional de la multiplicidad de referencias textuales o descontextualizadas, criticando la pérdida de la levedad y la vorágine de la destrucción generalizada, ejecutando un caos de arquitecturas tectónicas en un pantagruélico -además de gramático- orbe donde el mestizaje es un laberinto cuya salida nos conduce al vacío indómito de una capital por descubrir, planificar, proyectar, edificar y habitar, fenómeno ella de un hombre apátrida. Codifica emblemas y particulariza los hitos autónomos y nacionales para aunarlos en el desconcierto. Y, si los jardines (no los mesopotámicos míticos exclusivamente) pueden ser naturaleza domesticada y nos congracian con el medio natural que se abandonó o arrasó (justificando así nuestra evolución hacia el hombre vertical), también la seriación de arquitecturas panegíricas es un recurso para tratar de inmolar lo inanimado en un afán de socialización visual que compite con los prójimos en controversia: todos iguales, pero ansiosos y, a veces, convenientemente diferentes. Eso sí: exigiendo  por soberbia y por megalomanía ciudades 'de firma' agónicas pero generosamente presupuestadas (su Nueva Babilonia es ese caleidoscopio global cuyo Genius loci es la resultante de lo bizarro).

También, la calidez meridional de Portofino, los precipicios ligures o amalfitanos, las colinas novelescas de Umbría, las palazzine para divisar condotieros o damas con armiños, y los colores cardiales que desde Siena se desglasan y nos seducen con terracotas, mármoles y canallas toscanos entre vides y ferragostos, son inductivos y circumpolares, registrando en la brújula de la retina las imágenes genealógicas de nuestra ontología occidental. Cuba Taboada agracia esa inspiración (¡cuánto debe a sus estancias en Perugia!) con una libertad sin cuotas y obediencias, asegurándonos que el Arte no es unidireccional (salvo el único sentido de la hermosura del gusto osmótico, que es particular, subjetivo, y no enjuiciable, condenable, o lisonjeramente retribuido). Por ello, también la creación alimentada desde el 'paseísmo' errabundo (no lo confundamos con lo desnortado, pues esto implica vicio perceptivo), es cimiento fundacional y pie derecho sólido donde apoyar miradas gobernadas por un entorno vívido y quizá duro que atrapa al ser humano desde los centros hasta los extrarradios. 

Minucioso, coloniza el vacío erigiendo artefactos, sucedáneos de las comunidades supuestamente organizadas y cívicas, hasta penetrar en el horror genuflexo del habitante que se despeña por las cervicales de la aglomeración, y abandona la poesía relacional y su práctica para mercadear con el día a día de su propia ausencia. Ese habitante que se esboza entre el tráfago y vaga flâneur sin ser visto, pero viendo; sin ser escuchado, pero escuchando. Y, al modo de los viajeros nómadas de biblioteca o de gran turismo, secuencia el reflejo de su soledad con las palabras átonas de sus itinerarios. 

En una conurbación centrípeta casi como Pangea, la estratificación voraz de esos alzados se diseña para que un vecindario procesional y callejero huya hacia los continentes de los cuadernos y hacia los bajos fondos de los barrios sin rehabilitar o, simplemente, acabe siendo nombre y números en una guía telefónica tan impersonal como el ADSL. Opera una capilaridad entre figura y trazo, entre tecnología y dibujo: paritario encuentro de la narración, del vedutismo transgénico, y de la definición de la creación como utopía (no son sus obras las idealizaciones platónicas de Tomás Moro, localizables y topográficas, pero sí son espaciales y gratificantes por su deconstrucción morfológica y bidimensional) en ciudades clónicas donde lo matemático (renacimientos a la florentina encapsulados dentro de secciones áureas que atisbamos ventilándose como pendones desde las fachadas) es imposible, ya que el orden genera caos en sus poleis y el damero del cardo y del decumano da un traspiés contra lo medieval gremial, enrevesado y protector de los burgos y sus altozanos.


Imágenes de la Exposición
Miguel Cuba Taboada

Entrada actualizada el el 26 may de 2016

¿Te gustaría añadir o modificar algo de este perfil?
Infórmanos si has visto algún error en este contenido o eres este artista y quieres actualizarla.
ARTEINFORMADO te agradece tu aportación a la comunidad del arte.
Recomendaciones ARTEINFORMADO

Premio. 09 sep de 2024 - 13 oct de 2024 / Madrid, España

#VersionaThyssen XXI

Ver premios propuestos en España

Exposición. 25 sep de 2024 - 10 mar de 2025 / Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS) / Madrid, España

Soledad Sevilla. Ritmos, tramas, variable

Ver exposiciones propuestas en España

Formación. 15 oct de 2024 - 30 jun de 2024 / Museo Nacional Thyssen-Bornemisza / Madrid, España

Organismo I Art in Applied Critical Ecologies

Ver cursos propuestos en España