Ya se puede visitar la exposición sobre Virxilio Fernández Cañedo que exhibe la galería José Lorenzo de Santiago. La muestra, que cuenta con 17 trabajos del artista, presenta óleos guaches y acrílicos de diferentes épocas y temáticas del pintor. Además, dada su importancia dentro de la trayectoria del artista, se ha querido conceder especial protagonismo a las escenas protagonizadas por mujeres. Todas las obras están disponibles para la venta.
A nivel formal las obras de Virxilio, tal y como se puede observar en la muestra, destacan por su dibujo sencillo, naif, intuitivo y de estructura esquemática. Su pintura siempre está marcada por el aspecto matérico, por la expresión abstracta del color y por un trazo muy marcado que construye las figuras. Su método va más allá de los límites del lienzo o de la tabla: en la muestra hay varios ejemplos en los que el marca forma parte indivisible del resto...de la obra.
La temática, con gran presencia de las figuras femeninas agrupadas, muestra un vínculo evidente con la tierra gallega como elemento misterioso, tradicional y abierto a interpretaciones. El contenido de sus obras es netamente gallego, irónico, barroco y de raíz popular en el que el mundo laboral y el ocio tradicional están muy presentes. Sus composiciones demandan al espectador que ponga atención a los pequeños detalles, como si de un cantero románico se tratase. Se podría decir que la obra exhibida es una descripción secular de Galicia.
Otro aspecto a tener en cuenta en la muestra es el paisaje, que destaca por su tensión abstracta y que, en realidad, refleja su entorno más directo. Son una exaltación de su ámbito cotidiano de vivencias más íntimas y personales. Otoñal y calmado.
En su conjunto, la exposición transmite la gran coherencia estética del pintor ourensano. Es, probablemente, el artista gallego más fácilmente identificable. En un simple golpe de vista podemos deducir por sus construcciones en relieve, su simplificación formal, su aire distante y sus juegos tonales que una obra es de Virxilio. Calidad, estilo y personalidad en la sencillez.
El artista
Virxilio Fernández Cañedo (Orense, 1925 – 2011) es un pintor tardío de formación no académica. Su primera exposición individual es de 1954, cuando el artista ya contaba con 29 años. En 1957 llega a París e ingresa en la École Nationale Supérieure de Beaux Arts, donde completa su formación. Allí también vivió la dureza de la emigración y la deshumanización de la gran ciudad, aspectos que influirían en su obra. Regresa a Galicia y se incorpora al Grupo Volter (activo desde 1963) de artistas orensanos, donde también se integran Xaime Quesada, Acisclo Manzano, Xosé Luis de Dios, Manuel Buciños, Arturo Baltar y Xavier Pousa. Este colectivo, muy diverso en lo formal, trataba de conectar con la cultura europea. Ya en 1962 participó en la muestra colectiva Illa Nova da Pintura Galega: A Gadaña, en la ciudad de Lugo. Allí, por los mismos motivos, confluían las ideas y obras de Reimundo Patiño, Alfonso Gallego y Ángel Johann. Es a partir de los 60 cuando empieza a configurar su universo particular de paisajes, costumbres gallegas y, a finales, el empleo de la tabla como soporte. Llegaría a ella por una serie de casualidades y acabaría afectando, de manera decisiva, a la expresividad de su obra. En los 70, además de exponer en Milán, arranca su etapa berlinesa. En ella enfrenta su obra a nuevas miradas, ajenas a las referencias gallegas. Berlín supone el éxito definitivo para el artista. En 1991 el Centro Cultural Caixavigo realizó una exposición antológica del pintor.
Imágenes de la Exposición
Virxilio. ST. 80 x 60. Acrílico sobre tabla — Cortesía de la galería José Lorenzo
Entrada actualizada el el 06 sep de 2018
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