Descripción de la Exposición
Vida No Orgánica
Non-Organic Life
Curador: John Ángel Rodríguez
Vida No Orgánica reúne 15 artistas que abordan procesos creativos que desnaturalizan el origen de los materiales que emplean o contradicen las propiedades de sus referentes constitutivos.
La arquitectura del edificio de GCP exige a los artistas establecer un dialogo con el espacio, por lo tanto las obras son generadas in situ; este gesto no solo advierte una apropiación del concepto de site specific intervention, también se convierte en un aspecto fundamental de los trabajos aquí exhibidos, que además de experimentar con las posibilidades de la interacción espacial que ofrece cada lugar de montaje, posibilita una fuente de abdicación a la figuración, esta es una propiedad que se puede percibir en los trabajos aquí expuestos. La selección de los artistas se llevó a cabo examinando tanto los portafolios como el ejercicio investigativo de cada uno de los creadores. Esta dinámica pretende preponderar la madurez conceptual y como cada uno de los procesos de ejecución pueden aportar discursivamente a la propuesta curatorial.
“Toda la vida en la Tierra está basada en la biología orgánica; por ejemplo, carbono en forma de aminoácidos”
Por el contrario la “Vida No orgánica” considera que el mundo inorgánico comprende una serie de configuraciones - que si bien son inanimadas - pueden expresar contenidos fértiles desde sustratos inertes, esta exhibición aborda este planteamiento mediante un lenguaje plástico que resignifica la materia estéril. Razón por la cual la muestra “Vida No Orgánica”, reúne a un grupo de artistas, quienes exploran a través de sus obras las posibilidades de la vida inanimada, empleando tanto recursos de carácter instalativo como la incorporación de materiales no monumentales.
La materia residual que se encuentra en una ciudad genera una amplia gama de cúmulos. Si observamos estos cúmulos como segmentos aislados, pueden ser interpretados como agenciamientos de micro ambientes; que a partir de la acumulación de distintos sustratos- conforman volúmenes que aglutinan materiales incompatibles, pero que debido al efecto corrosivo de la intemperie y el abandono resultan compactados como sólidos. A su vez estos cúmulos si son des localizados de su contexto urbano, asemejan formaciones terráqueas, motivo por el cual en algunas de las instalaciones podemos percibir superficies, que por su estructura morfológica, se aproximan a imágenes capturadas por dispositivos fotográficos satelitales.
La manera como se plantea la intervención in-situ en este proyecto curatorial, formula a los artistas realizar un ejercicio de disección y así extraer formas no orgánicas, para poder explorar las cualidades físicas de cada uno de estos segmentos y configurar una cartografía de paisajes inertes.
Trabajar con materiales no orgánicos para la experimentación fue una iniciativa adelantada durante la segunda guerra mundial, conocida como el proyectó Manhattan (Laboratorios de los Álamos 1942, New México, USA). Estas instalaciones en su inicio se dedicaron a la investigación y desarrollo de armas nucleares. El trabajo del laboratorio culmino con la creación de distintos dispositivos atómicos. Las bombas arrojadas sobre Hiroshima y Nagasaki, fueron el resultado colaborativo de distintos científicos al interior de este centro de investigación e innovación. Después de la guerra fría la orientación del laboratorio cambio y se diversifico hacia las nuevas necesidades políticas, que no requerían más de la creación de armas de destrucción masiva y sus esfuerzos migraron hacia la investigación de tecnologías anti-guerra. La exploración nuclear se redujo a simulaciones por computador, aun así el ambiente y las memorias de los experimentos adelantados en esta región, suscito distintas iniciativas activistas, que reclaman por el daño ambiental allí ejecutado y los efectos colaterales ocasionados a la población.
Vida No Orgánica observa la acumulación de materiales no orgánicos arrojados en las distintas coordenadas de nuestro paisaje urbano- como un accidente ambiental. Las proporciones de estas materias depositadas a lo largo de las calles de Bogotá, no se pueden comparar con los experimentos nucleares desarrollados en Los Álamos; sin embargo cada cumulo no biológico arrojado en nuestro entorno urbano contribuye al desequilibrio del medio ambiente.
Los artistas reunidos en esta exhibición rescatan, restituyen y en ocasiones desnaturalizan el origen de estas materias, algunos lo hacen desde la poética sintáctica de la materia, otros revitalizan estos sustratos mediante instalaciones inmersivas.
Exposición. 12 nov de 2024 - 09 feb de 2025 / Museo Nacional Thyssen-Bornemisza / Madrid, España