Descripción de la Exposición ------------------------------------------------------- ------------------------------------------------------- 'Vanguardia y libertad, Man Ray' es el título elegido para acercar a Vitoria-Gasteiz la obra de este singular fotógrafo que también fue pintor, cineasta y escultor. Cerca de doscientas piezas que hasta ahora han estado dispersas por Estados Unidos y Europa se reúnen en una exposición que pretende mostrar la integración de los movimientos dadaísta y surrealista de ambos lados del océano Atlántico en una única persona. Innovadoras y clásicas fotografías, objetos o dibujos permitirán al público disfrutar de las facetas menos conocidas de este artista revolucionario. Las provocaciones, los manifiestos o el escándalo sirvieron de hilo conductor a la convulsa sensibilidad creativa de los artistas de inicios del siglo pasado. Esta corriente, denominada dadaísmo y caracterizada por la burla absoluta a las manifestaciones artísticas de la época, dio lugar posteriormente al surrealismo, transición que Man Ray aplicó a su obra a través de una insólita evolución. Su nombre, junto a los de Marcel Duchamp y Francis Picabia, se hace hoy imprescindible a la hora de explicar el desarrollo de estos movimientos. Nacido en Filadelfia en 1890, Ray se trasladó a Brooklyn a los siete años de edad y allí tuvo sus primeros contactos con la vanguardia neoyorquina. En su país natal desarrolló su talento como fotógrafo y como pintor de óleos de bodegones y paisajes, e incluso retratos de estilo 'romántico-expresionista-cubista', como él mismo calificó. En los años 20 se trasladó a París, donde ejerció como pintor, creador de objetos, cineasta o cronista. Además, su afán por la innovación le llevó a inventar una nueva técnica fotográfica: el 'rayograph', imágenes abstractas obtenidas mediante objetos expuestos sobre un papel sensible a la luz y sin ayuda de una cámara, y que se convirtieron en rasgo identificador de su obra. En 1940 regresó a Estados Unidos atraído por la meca del cine. En Hollywood participó en varias producciones cinematográficas aunque sin olvidar nunca su espíritu pintor y fotógrafo. Años más tarde volvió a París, donde continuó investigando hasta el momento de su muerte.
Fotografía, pintura y objetos de creación propia, entre otras piezas, mostrarán la evolución de la obra de unos de los artistas más emblemáticos de su tiempo.