La exposición reúne cerca de 300 de obras procedentes de nuestro continente, la mayoría del centro de Europa, principalmente de zonas geográficas que comprenden desde Bélgica a Italia, y de Francia a Alemania. No obstante, la muestra también recoge representaciones de los países nórdicos, como Finlandia, Suecia o República Checa, entre otros.
La exposición pretende clamar contra la segregación de la escultura -considerada como hermana pequeña de las artes y muchas veces disciplina olvidada-. Se trata de una muestra singular, de una colección privada de obras del fondo propio de la Fundación de las Artes y los Artistas. Los amantes de la escultura tendrán la oportunidad de ver una exposición única que difícilmente se volverá a ver en nuestro país.
La muestra, que presenta un viaje temporal histórico comprendido desde los inicios de época moderna a principios de la contemporánea, acoge obres de más de 150 autores, entre los cuales destacan Rodin,...Bourdelle, Bartholomé, Meunier, Dalou, Drivier, Naoum Aronson, Despiau, Kolbe, Pina, Delamarre, Letourneur o Tommasi. La exposición también pone de relevo el papel de la mujer artista, remarcando el nuevo rol social que desarrolla en el mundo del arte. Entre ellas, destacan la austriaca Olga Behr; las franceses Marie-Jo Bourron, Noémie Debienne, Cécile Douard o Anna Bass; la sueca Dagmar Dadie-Roberg y la belga Claire Colinet.
La manifestación principal representada dentro de esta iniciativa artística es la figura humana, el gran tema de la escultura occidental de todos los tiempos; la belleza del desnudo, la danza y el movimiento, el deporte, la obra conmemorativa, las figuras alegóricas, la mitología y el erotismo conforman leas representaciones del cuerpo humano. Los artistas, sometidos a grandes cambios sociales, económicos, políticos y culturales, y partiendo siempre de la adhesión a una determinada corriente artística, han renovado las formalizaciones de la técnica y del material, pero no el estilo. La muestra recalca la importancia y la dependencia del material como herramienta de trabajo. Esculturas de mármol, bronce, yeso, madera, piedra, marfil i arcilla buscan apasionar al público asistente y abrir un diálogo artístico a través de un recorrido muy particular: la del creador.
El recorrido expositivo arranca con un período de mucho eclecticismo de finales del siglo XIX, que reúne desde la escultura realista hasta la escultura Art Nouveau; por otra parte, el impresionismo escultórico que mediante el arte de Rodin influirá tanto por parecido como por oposición a principios del siglo XX también tiene presencia. Los excesos del modernismo dejarán paso a la estilización geometrizante del Art Déco y el retorno a un nuevo clasicismo, así como una posterior aproximación al expresionismo o la Nueva Objetividad alemana, entre otros. Con todo ello, el MEAM presenta un amplio panorama artístico irrepetible.
Entrada actualizada el el 02 sep de 2014
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