Descripción de la Exposición
En esta exposición, la ciudad pierde su silueta. La niebla desdibuja el contorno de los edificios, dejando un ambiente más propio de la pintura. La nube, lo vaporoso se convierten en protagonistas, el vacío y el blanco, en motivos indispensables de esta plenitud silenciosa. Una ciudad fantasmal donde lo humano se hace presente por lo que no enseña.