Descripción de la Exposición
Artistas: Panfilo Nuvolone (Cremona 1581 - Milan 1651), Jan Frans Van Dael (Anveres, 1764 - Paris, 1840), Artur Silva, Manuel Stehli, Bianca Argimón, Mateo Revillo, Maya Inès Touam, Anastasia Finders.
La exposición se abre con dos naturalezas muertas, una pintura del pintor tardo manierista Panfilo Nuvolone (Cremona 1581 - Milan 1651) y otra de Jan-Frans van Dael (Anveres, 1764 - París, 1840), pintor flamenco activo en Francia durante gran parte de su vida. Las pinturas son sobre pizarra y mármol blanco, respectivamente. Lo que más destaca en la pintura de Jan-Frans van Dael es la presencia de una piña, una fruta exótica en la Francia del siglo XIX. La piña, originaria de América del Sur, fue importada a Europa por los conquistadores y se representaba en las pinturas como un símbolo de lujo y exotismo. Los primeros relatos europeos sobre Cristóbal Colón probando esta fruta se remontan al siglo XVI.
Hemos invitado a un grupo de artistas contemporáneos a responder a las pinturas y crear obras basadas en ellas. Artur Silva, teje narrativas que entrelazan las historias sudamericanas y la historia colonial. Su serie de fotografías se titula "Abacaxí", que significa piña en portugués brasileño y tiene sus raíces en la lengua tupí, - una de las muchas lenguas nativas de Brasil. Realizada en Lisboa, las fotografías reúnen el Monumento a los Descubrimientos, Central Tejo (una antigua central termoeléctrica) y una piña. Esta combinación de elementos no es casual. El Monumento a los Descubrimientos, un importante símbolo de la historia colonial y los viajes de exploración, se fusiona con la piña, que representa tanto el exotismo de América del Sur como el legado de la colonización europea en la región. La inclusión de la antigua central termoeléctrica, Central Tejo, agrega otra capa de significado a las fotografías. Esta infraestructura industrial puede evocar ideas de progreso, tecnología y la relación entre el pasado y el presente. La confrontación de estos dos espacios urbanos y la fruta "enfatizando el papel de la piña como una representación tangible de la cultura y los recursos explotación”.
Artur también presenta estructuras hechas con redes utilizadas para distribuir limones. El fruto está ausente, evocado en forma hueca. Esta ausencia puede transmitir una sensación de vacío o falta, y al mismo tiempo evocar la fragilidad de nuestros intercambios comerciales.
Los dos dibujos de Bianca Argimón invitan a reflexionar sobre la relación entre la producción industrial y la naturaleza. Ofrecen un enfoque distinto al abordar la producción mecanizada de naranjas. Aunque no se pueden considerar exactamente como naturalezas muertas, tienen un sentido renovado en su representación. En los dibujos, la fruta aún cuelga de los árboles, sin embargo, en uno de los dibujos, una de las naranjas ha sido etiquetada y clasificada por género.
El paisaje se convierte en el tema central de los dípticos de óleos sobre madera creados por Manuel Stehli un paisaje nocturno que espera el amanecer. A través de la disposición de los objetos y la composición escenificada, Stehli logra transmitir una sensación de espera y anticipación. Sin embargo, en este momento particular, el campo parece olvidar que está formado por la intervención humana y se convierte en el tema en sí mismo.
La descripción de la obra de Mateo Revillo nos transporta a un proceso creativo íntimo y personal. Revillo utiliza hojas de limón o vid como base para su escultura. Estas hojas se cubren con una fina capa de cera y luego se sumergen en agua. A través de este proceso, la arcilla utilizada inicialmente desaparece, dejando atrás una delicada membrana de piel translúcida. Estas esculturas se colocan cuidadosamente en cajas que preservan y protegen su esencia.
La propuesta de Anastasia Finders se sitúa en un punto intermedio entre la tradición gastronómica y la herencia barroca, creando una instalación comestible como punto de partida de la temporada. Esta instalación se presenta como un decorado vivo, un tocador dorado que se transformará gradualmente en una naturaleza muerta.
La obra de Maya Inès Touam, titulada Les Délices du Temps, es presentada como un retablo de madera compuesto por impresiones fotográficas. Esta creación trasciende las barreras temporales y territoriales, permitiendo que cada objeto y fruto, traído de vuelta y movido, encuentra finalmente su lugar y su aura.
Exposición. 13 dic de 2024 - 04 may de 2025 / CAAC - Centro Andaluz de Arte Contemporáneo / Sevilla, España
Formación. 01 oct de 2024 - 04 abr de 2025 / PHotoEspaña / Madrid, España