Me interesan los cuentos, los cuentos fantásticos, aquellos en que, por la suma de elementos reales y de elementos extraños e inexplicables se vacila entre una explicación natural o una sobrenatural y deja al lector sumido en la incertidumbre.

La irrealidad es una de las características del arte, nos enseña algo sacado de contexto para hacernos pensar, reflexionar, soñar.

Las tres artistas, Tamara Arroyo, Diana Larrea y Laura Torrado, juegan en sus obras con el binomio realidad-irrealidad, tanto desde del punto de vista sociológico como artístico.

Cada una de las obras es como un capitulo de este cuento, se sirve del anterior y ayuda a entender el siguiente; las tres artistas dan su particular visión de esta quimera pero al mismo tiempo juntas añaden fuerza al discurso general.

... style="MARGIN: 0cm 0cm 0pt">Tamara Arroyo presenta un proyecto titulado “Cuentos en el bosque” compuesto por fotografías y dibujos donde, según sus palabras, “la idea es generar situaciones que simulen una narración con habitantes de la zona, sobre el impresionante paisaje, que sirve de fondo a esas situaciones o acciones en las que quiero hablar de “la identidad de un lugar” de “determinadas características”.Tamara nos presenta lugares que deberían permanecer intactos, como si nuestro apego nostálgico por ellos pudiese ralentizar su implacable proceso de cambio.

Diana Larrea nos presenta dos piezas “Retrato de sociedad”, 2005 y “Cine Doré” 2004. El primer trabajo lo componen una serie de dibujos que reinterpreta los meticulosos retratos dibujados por Ingres de la elitista burguesía y aristocracia de su época en donde podemos apreciar cómo las figuras ilustres del momento son convertidas casi en ídolos atemporales. Diana pretende crear una nueva iconografía retratando a algunas conocidas celebridades de nuestra actualidad más reciente ya que, en un mismo sentido, también constituyen estereotipos de perfección, de vida de cuentos, para una gran mayoría de la sociedad actual.

En su otra obra la artista reproduce una escena de la famosa película de culto “Al final de la escapada” (“À bout de souffle”) del director francés Jean-Luc Godard. Ataviada con la misma indumentaria que la protagonista y acompañada por un actual Jean Paul Belmondo, recrea, paso a paso, con extrema fidelidad una conocida secuencia del film.

Por último Laura Torrado nos enseña dos fotografías y un video de la serie “Historias Bucolicas” y otro triptico de la serie “mentiras de agua”.

En el video de “Historias Bucolicas” tres mujeres, una de ellas con nariz de cerdo y las otras dos tocando de una manera obsesiva unos instrumentos la artista nos introducen en un mundo de irrealidad casi de pesadilla. Esta obra roza el absurdo pero al mismo tiempo es subversiva, una denuncia a la hipocresía social hacia el otro, el otro diferente. Su trabajo indaga en lo profundo del ser, en su individualidad pero a la vez sus imágenes hablan de aspectos universales; poseen algo teatral, en el sentido de construcción y puesta en escena.

En “mentiras de agua” en cambio se ve el cielo, de repente pelo y unos labios azules. Es una obra para soñar pero esta vez sin prejuicios con una mente libre. Esta pieza comienza y acaba la exposición: nos da la primera pauta para leer este cuento moderno y nos deja libertad absoluta para seguir fantaseando saliendo de la galería.