La pintura de Juan Rivas parte de los orígenes del paisaje moderno y sintetiza lo que este representa: sentimiento, expresividad y sobre todo concepto cultural. En función de esta expresividad conceptual, se configuran distintas vistas de la Galicia rural que surgen con una intención mas narrativa que estética. Son piezas impregnadas de realismo, que muestran las costumbres de los habitantes de los espacios representados, unos espacios intervenidos y modificados con desacierto por la mano del hombre.

Sus pinturas se basan en los pequeños detalles, requieren de una concentración de la mirada, de una máxima atención. Representan lugares donde lo importante es el escenario pero no tanto su enfoque global, sino mas bien las particularidades de este: la configuración caótica, el feísmo de las construcciones, la falta de lógica en la distribución parcelaria... Y esa visión encierra una critica, una llamada ... de atención sobre los motivos que han llevado a esta problemática: la mentalidad de los ocupantes de estos paisajes y la mala praxis de quienes los gestionan.