Descripción de la Exposición Se habla del vacío como la ausencia total de materia, de contenido físico o mental. Prefiero pensar en el vacío como una promesa, como la posibilidad que te ofrece un espacio desocupado abierto a las sugerencias. La acción de crear, de llenar y desalojar, ha estado siempre presente en esta conquista del vacío, sin pensar en las consecuencias y cicatrices que produce la insistencia de trabajar en un espacio tan frágil. Se supone que deberíamos tratarlos y materializarlos sin saber cuándo se constituyen y qué proporciones deben tener para existir. Se puede entender que un vacío es el comienzo de algo y es aquí donde el artista representa de manera insistente la idea de dialogar con lo material y lo inmaterial. Todo vacío supone un silencio y la mínima intervención en ellos nos produce un sonido producido por los materiales, su forma o geometría. Juan E. Correa nos muestra en 'Rúbricas' un espacio filtrado desde el vacío. Sus piezas, trabadas en el vacío, nos descubren la presencia y el tacto de un espacio nuevo perfectamente equilibrado entre lo material y lo inmaterial, donde el color se posiciona solo en el alma del material, su sección. Cada una de sus piezas termina donde la otra comienza, un bucle de inercias que ofrece la posibilidad de imaginarlas recorriendo un espacio común. El aluminio recorre el espacio insistentemente, recordando los arrepentimientos del trazo del dibujo que visualizan el movimiento del objeto. Estática pero latente en el espacio, como el pensamiento y la intensión, dibujos y esculturas se muestran con la idea de pertenecer a ese vacío.