Descripción de la Exposición Trabajar el concepto en el cual la obra siempre hable del lugar, de sus vivencias, de su gente. Me desplazo a observar lugares, examinando de cerca su estructura como lenguaje para poder conservar parte de su memoria, dejándola impresa en las piezas que realizo, capturando la identidad del espacio. Con la intención de dotarlas de una carga y contenido histórico y emocional, junto con la actitud de preservar, ser conservador a modo de arqueólogo, de estados, tanto histórico-sociales como histórico-corporales. Piezas contenedoras, en el que existe el ejercicio de borrar, sacar y marcar, muestran entidades frágiles y humildes, donde se destaca una actitud sustentada en el paisaje y la naturaleza. Crear una obra en la captación del desgaste y de la perdida, mediante el batido de lámina de plomo sobre la última capa creada en el paisaje. El compromiso se centra en una observación meticulosa del entorno, que nos propone una reflexión sobre el hombre y su espacio. Una mirada táctil, donde incisiones, presiones y deformaciones perturban y alteran la naturaleza. Las formas están captadas justo en el umbral, en que empiezan a hacerse invisibles. En proceso de devenir, aparentemente débiles, adquieren una fuerte carga emocional, rotunda y cálida. El rescatar permite expresar el ahora. Examinando de cerca, sutilmente los lugares, el cuerpo, el rostro, éstos nos muestran su propia estructura, como lenguaje. Como buscador me implico en un presente, un lugar donde el paso del tiempo y el espacio creado, queda reflejado y adherido, a la vez que la memoria del lugar, la imagen, y la faz, también queda impregnada, como registro en la obra. Capturando así la identidad de los espacios. La acción justa, surge espontánea, plasmándose en la materia plúmbea, siendo testigo de una realidad precisa del momento en su captación. La ductilidad del plomo y su utilidad en el tiempo, como protector de lugares con historia, es equivalente a la captación y conservación del lugar presente en la obra. A modo de conservación, como si de piezas arqueológicas se trataran, donde queda impreso, una memoria histórica del momento. La pieza, es la huella de la impregnación de un hecho, la transformación de un estado, donde el peso ejercido, todo lo envuelve, quedando como testigo de contacto. Donde nada queda inerte a nuestros ojos, puesto que así, constituye un signo verdaderamente singular que remite a la memoria histórica de cada lugar elegido. Encontrando una fuente de reflexión, de contemplación y de meditación, del paso del tiempo, y la entidad del lugar. Pretender la captura del rastro de una identidad, el rescate de la impronta del territorio, donde lo cotidiano queda reflejado. La obra se encuentra, en la importancia de la no ocultación de la propia naturaleza del lugar y de la materia y sus peculiaridades, como medio más adecuado para desarrollar su discurso. Necesidad de proclamar con energía la libertad expresiva del gesto/acción, potenciando el lenguaje propio del material utilizado. El ser muy sincero con la obra, para que surja verdadera. De esta naturaleza, la piel de plomo, se tensa, se pliega, se rompe enérgica, se agrieta, se excava, se raspa, se moldea, conserva la memoria de laceración, la revolución del movimiento en cada golpe impreso. El material se quiebra y se petrifica y aporta el color a la pieza, la pincelada del oxido se empasta o se diluye, el color se incrusta en el soporte. Construye una fonética propia, un dialogo para poder con libertad enfrentarse o adquirir el valor de mirar y abrazar el ahora. Realiza un ejercicio de reflexión sobre la existencia y nuestro destino, sobre la perdida y consecuente búsqueda de identidad de espacio en el cual habitar. Búsqueda apasionante del azar, la memoria, el paso y el peso del tiempo, las representaciones culturales, el paisaje, la historia, la captura de la huida de la forma, el desgaste, el accidente, la poética de lo encontrado, de lo real, el fragmento, la evocación de cambio y regeneración, la fuerza e instante y la fluidez, conforman Rescate Plúmbeo, el cual abraza el espacio y se yergue absorbiendo y reconvirtiendo los rasgos del lugar. Cada impronta, se incrusta como argamasa emocional en las pieles de plomo, construyendo a su vez escritos veraces del lugar.
Exposición. 13 dic de 2024 - 04 may de 2025 / CAAC - Centro Andaluz de Arte Contemporáneo / Sevilla, España
Formación. 01 oct de 2024 - 04 abr de 2025 / PHotoEspaña / Madrid, España