'El viento del corazón Mueve la persiana de bambú Y mi corazón'

Ransetsu

He elegido este otoñal haiku japonés del siglo XVII para darle el tono adecuado a la celebración de esta nueva exposición de Paco Ñiguez. Es otoño en una ciudad mediterránea y es otoño en este nuevo encuentro de la galería Bambara con uno de sus creadores favoritos.

Paco Ñiguez (Cartagena, 1959) es un pintor de larga trayectoria, creador de un mundo iconográfico propio que reconocemos y admiramos a través del tiempo. Uno de mis primeros textos para una producción plástica fue para una carpeta de serigrafías 'Entre mitos y flautas' (Cartagena, 1986) de varios autores, en la que ya participó Ñiguez.

Muchas han sido las exposiciones individuales y colectivas que hemos preparado juntos a partir ... de entonces y muchas las satisfacciones por tener tan cerca la obra de un creador plástico de tanta profundidad filosófica, de tanta técnica atemporal, de tanta emoción contenida, de tanta atmósfera sugerente, de tanta narrativa metafísica inacabada. Es mucha mi admiración por Paco Ñiguez.

Pasear entre las obras de la exposición es pasear entre los prodigios de la vida, como el de saber darle entidad a nuestra existencia, como el intentar buscar nuestro sitio en el mundo, como el de lograr una comunicación más o menos fluida con nuestros semejantes, como el de saber transmitir nuestras emociones de forma equilibrada, como el de esos personajes de Ñiguez que contemplan ensimismados y meditabundos sus vidas, tratando de profundizar en ellas.

Es otoño y el prodigio de la vida sigue siendo sobre todo, y como estaba escrito en el templo de Apolo en Delfos, 'Conócete a ti mismo y conocerás el Universo y a los dioses'.