Instituido por el Ministerio de Cultura en el año 1994, es el máximo reconocimiento otorgado en Cuba a un creador de las artes plásticas. Se concede anualmente a un artista visual cubano, vivo y residente en el país. El Premio Nacional de Artes Plásticas se confiere por el conjunto de la obra realizada a lo largo de la vida, que constituya un aporte valioso al desarrollo y a la historia de la plástica cubana. Se consideran sus logros más relevantes, tanto su trascendencia como por su proyección nacional e internacional. Este reconocimiento se concede a través del Consejo Nacional de las Artes Plásticas, entidad responsable de recepcionar las propuestas de las veintes instituciones culturales designadas para nominar candidatos. Asimismo, designa un Jurado compuesto por relevantes personalidades de la esfera de las artes plásticas y presidido por el Premio Nacional seleccionado el año precedente.