Descripción de la Exposición Hoy quiero pintar un cuadro. Casi todos los días quiero pintar un cuadro, o muchos cuadros, porque los veo en mi mente, porque necesito expresarlos y sacarlos de dentro, porque puedo interpretar el mundo a través de la pintura y de la plástica. Hoy voy a pintar un cuadro más para esta exposición. Escogeré un lienzo, tal vez ése que ya está pintado, y lo pintare otra vez. No me convence lo que muestra y pienso que esta vez lo haré mejor. Esta vez simplificaré más, contrastaré con más intensidad los espacios importantes y sacaré algunos gestos que me pertenecen... Pero sobre qué pinto. Siempre la misma historia: qué pintar. Esta vez, como casi todas, no tendré un motivo concreto aunque todo me interesa, todo me afecta y casi nada me sorprende ya. Tal vez sea el propio lenguaje plástico y su ejercicio el que conecte con las emociones y sentimientos más profundos. Tengo que forzar esa disposición, asociando experiencia plástica y contenido espiritual, de ahí nacerá el color y el gesto que lo exprese. Si fallo lo intentaré otra vez. Llevo así toda la vida, no me preocupa. En mi mente veo el esquema inicial de la obra, tal vez un color que en principio no es propio, y luego veré cómo asociarlo a mi lenguaje colorista. Es complicado. Ese camino no dará frutos... Ahora tengo que crear la tensión y el equilibrio necesarios. Usaré algún grafismo recto que defi na el plano; luego lo romperé de nuevo, ¡pintando y despintando! ¡Algo está pasando ahí afuera! Todo esto no es tan bello, ni tan desgraciado, ni tan horrible. Se contienen los ritmos en algunos y en otros aumentan. La normalidad no existe, no puede existir, somos personas animales. No somos perfectos, ya nos cuesta comportarnos, hay algunos depredadores al acecho. Bueno, me gustaría imprimir un poquito de luz a este cuadro. Quiero que trascienda la ilusión, que el espectador piense que hay motivos y caminos que nos pueden ayudar. Tampoco me resisto a darle otro toque de atención. Usaré gestos en gris o en negro. La cosa es seria: se avanza poco, hay demasiados intereses, y además, con tan poco criterio, tan poca sensibilidad... Qué vamos a hacer, somos unos glotones aprovechados. Aquí la mancha tiene más contención, está más definida, pretende dejar constancia de lo que pienso y no puedo concretar. ¡A las puertas de la abstracción muero! Es el momento del equilibrio. Cederemos todos: el rojo, el negro, el azul el gris, el carmín... Menos intensidad, más claridad, más luz... Se repiten los toques compensando el espacio, el blanco reclama mi atención; es la madre de todos los colores y empieza a parir sobre su luz. A veces se queda solo. Recupero la cordura sobre el blanco y empiezo de nuevo. Ya casi estoy acabando... Y de qué va este cuadro, de qué habla, qué expresa. No lo sé pero me gusta. Esta vez creo que he acertado: tiene fuerza, no es un paisaje pero podría serlo, tampoco es un interior pero podría serlo; debería ser lo que el espectador quiera que sea. Dejemos que eso ocurra.
Premio. 27 ene de 2025 - 10 mar de 2025 / Vitoria-Gasteiz, Álava, España
Formación. 01 oct de 2024 - 04 abr de 2025 / PHotoEspaña / Madrid, España