Descripción de la Exposición Primera exposición en Bilbao de Enrique Marty, calificado de enfant terrible del arte español más joven. Enrique Marty se ha convertido en uno de los jóvenes con más proyección en el panorama artístico peninsular. Es pintor desde niño, estudió Bellas Artes en su ciudad natal y su obra camina por derroteros complejos donde conviven la escultura y el vídeo con la pintura. También trabaja en el teatro y firma las escenografías de las obras dirigidas por José Carlos Plaza. Originalidad, habilidad y talento, son las claves de su trabajo. Podemos decir que Marty es la versión española del espíritu británico de la famosa Sensation, porque en él existe algo de los hermanos Chapman, de Ron Mueck y, sobre todo, de Richard Billingham. Como Billingham (que fotografía las andanzas cotidianas de su repugnante familia), Marty pretende incomodar al espectador al exhibir a los miembros de una familia corriente como monstruos de feria. Marty con sus creaciones de lo siniestro carpetovetónico, es un devoto del humor negro, tan arraigado en la tradición española, desde Goya hasta Solana y Dalí, desde Quevedo hasta Max Aub con sus Crímenes ejemplares. Enrique Marty se dio a conocer en ARCO del 2000 con sus frescas y delirantes pinturas a modo de álbum familiar. Después expuso en el Espacio Uno del MNCARS de Madrid, el año pasado el MUSAC de León presentó una gran exposición individual del artista salmantino y en los últimos años ha desarrollado una coherente carrera que le ha llevado a galerías de Ámsterdam, Munich, Nueva York o Australia. Espacio Mínimo en Madrid, Enrique Guerrero en México y Casa Triângulo en São Paulo han mostrado también sus obras a veces siniestras y siempre irónicas. Fascinado por el sentido trágico y la imaginería del Barroco, Marty presenta al público un inquietante documento de su peculiar cotidianeidad. "En mi caso, explica el artista, la escultura refleja los personajes terroríficos de las pinturas, los acerca al espectador. Compartir cuerpo y mente con uno de mis muñecos es lo que crea inquietud". Sus personajes son grotescos, siniestros, insinúan la risa o el miedo. Su intención es "darle una bofetada al espectador, llamarle la atención sobre sí mismo porque quiero introducir al espectador en el misterio, crearle cierta incomodidad pero sin que sepa muy bien por qué. El arte que juega con la belleza no me interesa demasiado porque acomoda". Y el artista concluye: "La Historia del Arte siempre ha mostrado su entorno inmediato; lo hacía Caravaggio camuflando de historias bíblicas a las gentes de su tiempo. Fijándome en lo que está más cerca de mí estoy mirando al mundo. Lo más siniestro puede estar en tu propia casa".
Formación. 01 oct de 2024 - 04 abr de 2025 / PHotoEspaña / Madrid, España