Mucho se ha dicho sobre la cultura material característica de las sociedades indígenas en Venezuela, y aún así persisten prejuicios que tienden a reducirla a una habilidad meramente artesanal, como si la suya no fuera también -como la nuestra- la materialización del universo espiritual y simbólico de una sociedad; es decir, una de las manifestaciones posibles del arte.
La exposición que presentamos, le brinda al público caraqueño una oportunidad para conocer, apreciar o estudiar algunos de los mejores ejemplos del arte Ye´kwana, pueblo indígena que habita en las selvas de los ríos Caura y alto Orinoco, en su devenir histórico, esencialmente en sus expresiones más potentes: la cestería y las tallas en madera, con algunos contrapuntos de otras formas artísticas. Cuando nos referimos a su devenir, es porque no nos proponemos mostrar el arte de un pueblo extinto, testimonio etnográfico de una cultura ya pasada, sino la producción de un pueblo...que sigue creando, como cualquier otro, a partir de una sensibilidad esencialmente colectiva, cuyos fundamentos son tan amplios y profundos como su existencia social.
El desafío de apreciar las formas artísticas tradicionales y contemporáneas de la sociedad Ye´kwana, supone explorar el contexto cultural a partir del cual se crean, y reconocer en ellas el retrato de la sociedad que las inspira, a través de elementos narrativos, gráficos, técnicos y funcionales.
Por eso hemos pensado la muestra en dos áreas complementarias: la primera, dedicada a dibujar lo que fuera su universo estético tradicional, en artefactos de elaboración principalmente masculina. La segunda, pensada para exponer sus formas artísticas contemporáneas, donde la mujer conquista un rol protagónico. Ambas áreas están sin embargo integradas por la dimensión trascendente que las obras de arte amerindio recrean, que no es más que la cultura Ye´kwana y su continuidad en el tiempo, así como por el testimonio "exterior", pero apasionado, que nos ofrecen dos destacadas fotógrafas: Barbara Brändli y Mariapia Bevilacqua. Las piezas expuestas provienen en su casi totalidad de la Colección Carolina y Fernando Eseverri y de la Colección ACOANA, a quienes le debemos este excepcional conjunto, y el placer de verlo ahora expuesto en la Sala Mendoza.
Texto de Sala Principal.
Entrada actualizada el el 10 oct de 2016
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