Descripción de la Exposición
Una artista de talento
Conocí a Belén Orta cuando todavía era una niña, sus abuelos amigos de mis padres y su padre amigo de mi infancia. Desde pequeña mostró dotes de artista, le gustaba jugar con la arena de la playa, modelaba pequeñas figuras que, después, el agua del mar deshacía. Se entretenía con sus lápices de colores y llenaba de dibujos sus cuadernos de clase. Muy joven decidió hacer de su afición una profesión y estudió durante cinco años en Valencia en la Academia de Bellas Artes de San Carlos.
Alumna aplicada llevó a término su carrera siendo todavía muy joven. Y muy pronto se lanzó a exponer en diferentes lugares de la región. Su mano parecía tener magia: esculpe en barro, en mármol, en libros, en metal, pinta en papel, en lienzo y en madera.
Sus obras, tanto escultóricas como pictóricas emiten luz, luz que atrae, luz que deslumbra. He visitado a Belén Orta en su estudio y la he observado con atención trabajar en lo que le gusta: la emoción de crear, de dar vida al lienzo o a la piedra: la dulzura entre el corazón y la precisión del pincel o de cualquier otra herramienta.
La alegría o la tristeza actúan como una leve y al mismo tiempo fuerza interior que da seguridad a la inspiración y que transforma todos los elementos, dando vueltas sobre un punto que viene a ser la cima de su idea: la creación artística. Su escultura forma parte de una serie de estudios realizados en la naturaleza. Sí, Belén Orta se siente especialmente apegada a su interpretación abstracta de la naturaleza -esa su propia fuerza dramática conferida a su obra, que se sitúa entre la tradición y su propio modo de interpretarla.
El mundo le inspira una idea reflejada en un rostro humano o en una ola de mar y la artista la extrae de su pensamiento y le da vida real, vida tangible, vida perecedera. Sus obras son sus vástagos, ella lee en ellos lo que ellos quieren expresar y es ella, únicamente ella, quien les da respuesta. Su Exposición hace unos años en la Muralla Bizantina causó sensación, otras le sucederían: MURAM, Villa de Móstoles (Madrid), 7º Incontro Internacionale di Scultura mármol rosso di Verzegnis, Italia. La obra de Belén nos hace leer como en un libro inmenso, un libro que nos esclarece el mensaje de la autora, Aunque cada lector pueda llegar a verlo de distinta manera. Podría llegar incluso a interpretarse como una obra enigmática, sus movimientos son un tanto desconcertantes, justo sus perfiles, sin retoque, sin que la duda se haya llegado a implantar.
Es además una obra, tanto la pictórica como la escultórica, paciente y reflexiva; cada detalle lo testimonia, se afirma -diríamos de una forma inmediata-, inevitable y con cierto matiz de melancolía, una melancolía que nos haría pensar a una de las imágenes de Prometeo, que milagrosamente hubiéramos encontrado en un viejo texto de la biblioteca de nuestros antepasados. Belén Orta es una mujer pintora-escultora en cuya frente brilla el signo de la artista cuya originalidad anuncia un arte de futuro, de ensueño colectivo: el anhelo de una obra ingeniosa con resonancia de mitos de tiempos inmemoriales, de amor a la creación, al impulso irrefrenable de su vocación.
María Teresa Cervantes (escritora)
Premio. 09 sep de 2024 - 13 oct de 2024 / Madrid, España
Exposición. 27 sep de 2024 - 17 feb de 2025 / Museo de Bellas Artes de Bilbao / Bilbao, Vizcaya, España
Formación. 15 oct de 2024 - 30 jun de 2024 / Museo Nacional Thyssen-Bornemisza / Madrid, España