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Ya desde muy temprana edad, Miguel Estrada muestra grandes inquietudes artísticas, lo que le lleva a matricularse en la Escuela de Artes y Oficios de Avilés. Paralelamente, y durante esos primeros años de su carrera pictórica, amplia sus conocimientos sobre la técnica del óleo en diversos talleres de pintores de la comarca, adentrándose en la temática costumbrista del paisaje, temática que abarcará las primeras realizaciones del pintor.

A principios de la década de los noventa, su carácter inconformista le lleva a romper con todo lo que había hecho hasta el momento. Durante esta época termina sus estudios académicos y abandona los pinceles en busca de un nuevo estilo para sus cuadros, dedicándose a investigar y desarrollar nuevos horizontes pictóricos que transciendan el mero realismo estético y ... contemplativo que presidía sus primeras obras. Es, a partir de este momento cuando su creación da un giro radical y se impregna de un poderoso estilo autodidacta que interrelaciona el óleo y el acrílico con la materia más diversa, utilizando la crítica social como fondo moral de sus cuadros, para expresar, con técnicas mixtas y collages, las inquietudes del pintor.

Paralelamente a su producción artística crea en 1997 el Grupo pictórico Trazoss, grupo que, una década después, cuenta con colectivos en Gijón, Avilés, Villalegre y Pravia y más de un centenar de alumnos. Así mismo es el responsable del Taller de Artes Plásticas de la Asociación de Personas con Discapacidad “La Amistad” – Avilés, así como uno de los profesores de Dibujo y Pintura de “Las Artes” en Avilés.