Descripción de la Exposición ------------------------------------------------------- ------------------------------------------------------- El Museo del Prado presenta la primera exposición que se dedica al pintor Joachim Patinir, artista flamenco del siglo XVI contemporáneo del Bosco a quién se puede considerar como el padre del género del paisaje. Aparte de la gran importancia de su papel dentro de la historia del arte como iniciador de la pintura de paisajes, Patinir es enormemente atractivo por la poesía y misterio de su visión de la naturaleza, además de un pintor enigmático debido al reducido número de obras suyas que se conservan y a lo poco que se conoce sobre su vida. La exposición, patrocinada por Acciona gracias a su reciente incorporación como miembro Benefactor del Museo para su programa de conservación y restauración, reúne 22 de los 29 cuadros que su comisario, Alejandro Vergara, jefe de conservación de pintura flamenca del Museo del Prado, ha atribuido a Patinir, además de otras 27 pinturas y obra en papel de sus predecesores y seguidores, como El Bosco, Durero o Van der Weyden, entre otros. La muestra concentra la mayor proporción de obras del artista que se ha reunido nunca, la mayoría de las cuales apenas han salido de los lugares en los que se conservan debido a los específicos problemas de conservación que presentan los óleos sobre tabla. Entre las obras del maestro flamenco que estarán presentes, seis corresponden a colecciones españolas (cuatro del Prado, una del Museo Thyssen Bornemisza y otra del Monasterio de San Lorenzo de El Escorial). Cabe destacar la extraordinaria presencia de sus obras en nuestro país, ya que casi una cuarta parte de su corpus se encuentra en la Comunidad de Madrid, dándose la mayor concentración en una única institución en todo el mundo precisamente en el Prado. Entre las obras más importantes que participan en la exposición, al margen de las cuatro que atesora el propio Museo del Prado, figuran el Martirio de Santa Catalina y Bautismo de Cristo del Kunsthistorisches Museum de Viena, el Tríptico con la penitencia de San Jerónimo del Metropolitan Museum of Art de Nueva York, el hermoso aunque pequeño Paisaje con la huída a Egipto del Koninklijk Museum voor Schone Kunsten de Amberes y el espectacular Paisaje con San Cristóbal de El Escorial Se trata de la muestra más ambiciosa que el Museo consagra a un autor flamenco del siglo XVI y su calidad de conjunto ha sido posible gracias a los generosos préstamos conseguidos pero también a que la institución conserva una de las mejores colecciones del mundo de pintura neerlandesa de los siglos XV y XVI, incluidos los cuatro óleos del artista que se presentan en la exposición recientemente restaurados. Corazón de la exposición La parte principal de la exposición se centra en 22 cuadros de Patinir, la mayor representación de obras del artista que se ha reunido nunca. En un tiempo en el que era habitual que el pintor trabajase en colaboración con su taller, la muestra trata de delimitar qué obras fueron pintadas por el artista y cuáles por sus discípulos. Así, en la exposición se incluyen dos nuevas obras cuyos estudios parecen revelar la autoría de Patinir o su taller: el Tríptico de San Jerónimo y Paisaje con la crucifixión, las dos procedentes de colecciones particulares. Las obras se exponen combinando el criterio cronológico con el estilístico. Tres salas dedicadas a los cuadros de Patinir mostrarán no sólo la originalidad de su estilo sino la problemática que presenta su producción. Sus obras se agruparán atendiendo a las similitudes de las diferentes versiones que hace de un motivo, como de los episodios religiosos de San Jerónimo o el descanso en la huida a Egipto. Su progresivo dominio del tema paisajístico como elemento preponderante en sus obras culmina en sus grandes pinturas tardías. Tres de ellas forman el corazón de la exposición: Paisaje con San Cristóbal del Monasterio de El Escorial, El paso de la laguna Estigia y Las tentaciones de San Antonio Abad, ambas del Museo del Prado. La estela de Patinir A modo de epílogo, la muestra se cierra con una sala en la que se exhiben cuadros que demuestran el enorme impacto que tuvo Patinir entre sus contemporáneos, como Quinten Massys (1466-1530), Bernard van Orley (h. 1488-1541) o Joos van Cleve (muere en 1540 ó 1541) o pintores de la siguiente generación, como Herri Met de Bles (h.1510-después de 1550), o Jan van Amstel (ca. 1500-ca. 1542).
Con un total de 48 pinturas, 22 de Patinir y el resto de sus más importantes precursores y seguidores, la muestra permitirá al público contemplar por primera vez reunida la mayor parte de las obras de este singular pintor cuyas composiciones siguen sorprendiendo por su peculiar combinación de fantasía y realidad y por su lírica evocación de la inmensidad de la naturaleza.
Exposición. 26 nov de 2024 - 16 mar de 2025 / Museo Nacional del Prado / Madrid, España
Formación. 23 nov de 2024 - 29 nov de 2024 / Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS) / Madrid, España