Descripción de la Exposición El proyecto Panorama vocacional se ha desarrollado gracias a la generosa participación tanto de los jesuitas como del resto de personas relacionadas con el funcionamiento y mantenimiento del Palacio Ducal de Gandía, lo que conlleva la libre implicación de todos los padres pertenecientes a la Compañía de Jesús y vinculados actualmente o en el pasado al Palacio, y sobre todo de aquellos naturales de la ciudad de Gandía. Panorama vocacional nace como un proyecto artístico de carácter documental, desarrollado en cuatro fases: en primer lugar, la realización de una conversación/entrevista personal con cada uno de los jesuitas participantes; en segundo lugar, la realización de dos retratos individuales de cada uno de ellos: uno en el lugar del Palacio o la residencia que más le gustase, y otro en el lugar que menos le atrajera; en tercer lugar, realicé un recorrido fotográfico arquitectónico de todo el espacio: palacio y residencia; y por último, la cuarta fase, consistió en la realización de un retrato de grupo de la mayoría de los jesuitas que voluntariamente decidieron participar. En Panorama vocacional, la fotografía y el vídeo ponen en evidencia la complejidad de los procesos de comunicación mediante los cuales se establecen las relaciones entre información, representación y experiencia visual: la manera en que las cosas se insinúan (fotografía) y hablan (vídeo), la relación entre lo que se ve y lo que se dice, lo que se oculta y lo que se muestra, lo invisible y lo visible. Por medio de la fotografía y del video, se desarrolla un discurso artístico centrado en la utilización del cuerpo humano, lugar donde conviven todo tipo de aspectos: Historia, Antropología, Religión, Política, Sexualidad, etc. En esta ocasión, el cuerpo es utilizado como excusa o escenario donde lo individual y lo religioso se entremezcla para producir una reflexión sobre el comportamiento humano dentro del núcleo social. El cuerpo, o quizás los cuerpos, por la utilización de numerosos personajes en la puesta en escena, posan ante la cámara de forma natural pero adquiriendo papeles simbólicos y expresivos con elevado grado dramático. El cuerpo humano, posee una dimensión metafórica donde se entremezcla su carácter histórico-tradicional -adquirido con el paso del tiempo- junto a una perspectiva personal. El retrato de los participantes les sitúa dentro de un contexto dramático-teatral, donde todo es posible. Y de esta manera, el resultado final se impregna de cierta artificialidad debido a la presencia de la cámara y al contexto en el que se retrata al modelo: Residencia Jesuita y Palacio Ducal de Gandía. Panorama vocacional en definitiva revisa la relación entre el artista y su modelo a lo largo de la Historia del Arte y concretamente dentro de la Historia del Retrato, donde siempre se establece una relación de poder entre ambas partes.