Descripción de la Exposición ------------------------------------------------------- ------------------------------------------------------- (Cómo superar el encuentro con un paisaje) Imaginemos una fruta, cualquiera que sea, y la observación detallada de una persona hacia ella. Veamos mentalmente cómo aquella fruta se toma con la mano, se acaricia, se pesa, se le da vuelta buscando el lugar para morderla y finalmente, de manera pausada, se empieza a saborear y absorber de ella todos sus jugos hasta desaparecer de la mano. Esta imagen solamente es posible gracias a un extraño proceso del ser humano en aproximarse visceralmente al entorno para calmar su sed y su hambre. Nutrió hábilmente su cuerpo con un 'algo' que se suspendía de un árbol y sin sospecharlo, como aún podría suceder hoy día, ese pedazo de paisaje, de naturaleza viva, lo habitó. ... No deja de ser curioso que el término paisaje tenga que ver con la línea del horizonte y por ende con la fuerza de gravedad. De la misma manera resulta extraño que esa horizontalidad se refleje en la disposición de los ojos en el ser humano que ha habitado durante siglos dicho paisaje. El paisaje se rige en términos de la verticalidad de quien lo observa contra la horizontalidad de la naturaleza: un cielo etéreo que levita frente al peso gravitacional de la tierra. Y sin embargo, al mismo tiempo esa tierra pesada está gravitando en el espacio como sostenida con unos hilos mágicos invocando una suerte de dilema donde el derecho y el revés o el arriba y abajo no se distinguen. ... Seguramente, en cuanto a la fuerza de la naturaleza y en cuanto a la sublimación del paisaje se trata, el movimiento artístico de mayor relevancia en la Historia del Arte es el Romanticismo Alemán. Una persona de pequeñas dimensiones es asaltada en su buena fe por una porción enorme de naturaleza que la engulle hasta dejarla sin aliento. Desde allí entendemos que el paisaje no es un ente independiente al ser humano sino que hace parte de él: su corporeidad solamente es posible por medio del paisaje que se construye en medio del infinito. Nada más excitante que una persona atrapada por el paisaje, pero a su vez, nada más poéticamente angustiante que ser mortales frente a dicho paisaje. ... 'Que paisaje tan bonito' es una frase recurrente al dejarse seducir por un paisaje. Pero al decirlo sucede también lo contrario: resulta bello ver a alguien que se vuelca ante un paisaje. Cuando vemos un paisaje nos sometemos a él de tal forma que nuestro cuerpo se hace paisaje, lo refleja. Es posible entonces, que nuestros rostros, nuestra mirada, nuestra posición corporal, etc., se deba a la cantidad de paisajes que muy desde el fondo hemos observado durante toda nuestra vida. De ser así, no dejemos de detenernos y de maravillarnos ante un paisaje: nosotros les debemos mucho de lo que somos.
Artistas: Sebastián Bejarano, María Elena Bernal, Cristina Cortés, Liliana Durán, Lia García, Santiago Vanegas, Alejandro Weyler y María Fernanda Zuluaga.
Exposición. 19 nov de 2024 - 02 mar de 2025 / Museo Nacional del Prado / Madrid, España
Formación. 23 nov de 2024 - 29 nov de 2024 / Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS) / Madrid, España