Oro y plata es una propuesta de exposición de Toni y Nuria Rodríguez Yuste, que pretende transmitir con nuestra mirada la densidad de nuestras vivencias, responde a una misma necesidad, de investigar y plasmar las diferentes visiones que captamos de Salamanca.

Salamanca es única por su luz transparente, que ilumina y contrasta las superficies provocando claroscuros barrocos, una luz que potencia el color. Salamanca es color, sobretodo es dorada, por el trigo, por el color de la piedra utilizada en la arquitectura, pero también es única por la línea, la línea que marca el horizonte del paisaje castellano y delimita un inmenso cielo, azul, estrellado o con todos los tonos inimaginables; por su gente, por su importante patrimonio cultural y artístico. Por todo ello, la hacen tan especial para representarla y para vivirla.

Oro y Plata, son ... los colores que mejor representan a Salamanca. La riqueza arquitectónica de la ciudad vieja declarada Patrimonio de la Humanidad, las dos catedrales, la Universidad y la Clerecía de estilo plateresco, la Plaza Mayor de estilo barroco, la de los trajes tradicionales charros, y sus complementos, la joyería de filigrana: el hilo de oro, las botonaduras de oro y plata, los bordados, toda esa exuberancia se potencia aún más por el contraste del carácter de sus gentes y por el paisaje castellano: austero y sobrio.

Oro y plata, trata de sintetizar imágenes, recuerdos y emociones. Es un homenaje a Salamanca, a nuestros orígenes, pero esencialmente, la exposición está dedicada a nuestros padres, José y Antonia, a nuestra familia que ha mantenido su arraigo, sus tradiciones y su cultura, valores que nos han transmitido, a la vez que nos integraban en la cultura catalana. Han sabido enlazar ambas culturas, en definitiva han sabido sumar y multiplicar. Nos han regalado su mirada especial que sin duda habrá quedado reflejada en nuestras obras.

Dos propuestas diferentes en un proyecto común para interpretar Salamanca.