Descripción de la Exposición Optimismo Radical, Un Proyecto de Marco Maggi, es una construcción que comienza en el atrio de entrada con una enorme columna de más de 10 metros de altura forrada con Post-its de color amarillo. A partir de este 'faro' se desarrolla un plano laberintico hecho de resmas de papel ubicadas directamente sobre el piso de la planta principal, una construcción rigurosa y llena de dudas, acentuada en la pared de fondo por una composición de sobres blancos. Las rutas por recorrer nos plantean varias preguntas: ¿A dónde nos llevan estas calles, estas avenidas?, ¿cómo funciona el laberinto?, ¿serán los cimientos de una edificación que nunca se consolidó? Hay un sentido ritual al entrar en esta 'construcción' que nos mantiene misteriosamente dentro del camino, doblando esquinas, dando vueltas, evitando saltar las resmas, la vía más corta; hay un respeto por el límite marcado y desorientación ante los múltiples silencios blancos que subrayan, aún más, las avenidas de color y nos marcan de nuevo la incierta ruta. Hay una impecable transición de la gran escala al mínimo detalle. Hay un léxico en este idioma que es sereno y silencioso, vocabulario compuesto por materiales cotidianos de oficina. Es un enigma la narrativa de las incisiones sobre cartulinas de colores que rematan muchas de las resmas de papel. Son una filigrana de dobleces curvilíneos y rectilíneos que sugieren majestuosas maquetas arquitectónicas, plataformas obsesivas que invitan al difícil ejercicio de detenerse y observar sin opinar. El artista dice: 'Cuando entiendo: hablo, cuando entiendo menos: escribo, cuando no entiendo nada: dibujo o corto papelitos', y agrega: 'Todas mis esperanzas están relacionadas con escándalos lentos o mutaciones imperceptibles. Mi única meta es hacer visible el tiempo en un mundo donde prestar atención resulta cursi y la delicadeza es considerada como una actividad subversiva'. --------------------------------- Marco Maggi Nació en Montevideo. Master en Bellas Artes de la Universidad de Nueva York. Optimismo Radical: instalación a tres tintas sobre 250.000 hojas de oficina. No soy partidario de las ideas claras. Construyo confusiones precisas para ser observadas sin la menor esperanza de ser informado. Promuevo pausas que intentan estimular nuestra frágil simpatía por lo insignificante. Conocemos la estructura del ADN pero no podemos recordar el alfabeto del genoma. No somos capaces de leer un pelo a pesar de tener claro que puede incluir información suficiente para clonar a nuestro mejor amigo. Esta incapacidad para relacionarnos con la nueva información debe asimilarse a la ceguera o definirse como un nuevo analfabetismo? En ambos casos lo más recomendable es asumir con paciencia y resignación que estamos condenados a saber más y comprender menos, víctimas de una indigestión semiótica. Cada día, miramos los noticieros de CNN sin poder percibir la diferencia entre una transmisión en vivo y la muerte. La percusión extrema de noticias impide toda repercusión de las noticias. Una sobredosis de drama es una anestesia perfecta, una herramienta de censura más eficiente que una tijera. Estamos fundando la sociedad de la información disfuncional: la realidad se hace ilegible; y las artes visuales, invisibles. Dibujar se parece a escribir en un idioma que no se leer. Entender menos es mi profesión. Entender cada día menos exige un entrenamiento riguroso. No entender es básico y muy saludable. Cuando no entendemos, dudamos, nos sentimos inseguros. Reducimos la velocidad de nuestras decisiones, multiplicamos nuestra atención, somos delicados y muy cuidadosos. Cuando no tenemos ninguna duda, cuando nos acompaña la fe y sus certezas nos transformamos en un peligro público capaces de tomar decisiones urgentes y radicales. En el arte, en la diplomacia y en los automóviles, la velocidad es trágica. Dibujar exige respetar una sola señal de tránsito: STOP. Cuando entiendo, hablo; cuando entiendo menos, escribo; cuando no entiendo nada, dibujo o corto papelitos. En los últimos años, hablé poco, escribí una página por semana, y dibujé 14 horas al día. Mi trabajo consiste en dejar de entender para focalizar toda mi atención en relaciones irrelevantes entre el papel y el bisturí. Todas mis esperanzas están relacionadas con escándalos lentos o mutaciones imperceptibles. Mi única meta es hacer visible el tiempo en un mundo donde prestar atención resulta cursi y la delicadeza es considerada como una actividad subversiva. Marco Maggi
Exposición. 19 nov de 2024 - 02 mar de 2025 / Museo Nacional del Prado / Madrid, España
Formación. 23 nov de 2024 - 29 nov de 2024 / Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS) / Madrid, España