Descripción de la Exposición Paul Virilio en su libro 'Estética de la desaparición' comenta que en Londres durante la segunda guerra mundial la gente, abrumada por la miseria de la situación, iba al cine más que en ningún otro momento de bonanza. A pesar de que las restricciones alimenticias y económicas eran severas, las salas permanecían abiertas casi las 24 h del día y siempre había una muchedumbre ansiosa esperando a ver las películas. El cine como instrumento para huir de la dureza de la situación, la sala a oscuras como refugio en el que sumergirse y experimentar otra vida ajena a través de unas imágenes que iluminaban algo más que aquellos espacios repletos. El objetivo, reemplazar, por unos momentos, la vida real por una de ficción, vivir de un modo prestado una realidad mejor y más confortable. En este sentido y en un mismo ambiente de precariedad, el de una tardía posguerra en España, podemos entender el material cinematográfico encontrado por el artista, unos elementos y objetos cuyo destino inicial era el de un público infantil y juvenil. En este nuevo proyecto para PM8 Jesús Pedraza Villalba (Córdoba, 1978) evita el carácter lúdico, de entretenimiento que pudiese tener el cine y este peculiar 'juego encontrado'. El artista construye una historia compleja cuya narrativa nos hace pensar no solo en el proceso mismo de la pieza sino también en las circunstancias que llevan a coleccionar unas imágenes, fotogramas defectuosos de viejas películas, despojos sin ningún sentido, que han dejado de formar parte de la estructura original de procedencia. J.P.V. encontró en una pequeña tienda de antigüedades lo que resultó ser una especie de juguete o entretenimiento para los niños españoles durante los últimos años del 'desarrollismo' y los primeros años de la transición democrática. Allí llamaron su atención unos pequeños sobres rosas, cada uno conteniendo un número similar de fotogramas provenientes de diferentes películas, fragmentos toscos y deteriorados que eran coleccionados como cromos o estampas y vendidos junto a unos visores rudimentarios que permitían una mejor visualización de las imágenes. El contexto es importante, ya que la percepción de la imagen era un asunto completamente distinto en los años 70 y 80 del s. XX. No resulta fácil volver sobre este periodo de nuestra historia reciente, conforme avanzamos no interesa mirar atrás, quizás para constatar que el avance tampoco ha sido tan grande. Las imágenes encontradas, fotogramas que proyectan secuencias de películas olvidadas, actúan como recordatorio de algo ya perdido, del paso inherente de un tiempo que no vuelve. A través del azar se deconstruye una historia, en este caso fílmica, para crear otra nueva con unos elementos que posibilitan otra lectura. Este proyecto específico para PM8 está articulado en torno a una película creada a partir de los fotogramas encontrados, fotogramas que no siguen un orden narrativo ni una lógica secuencial al uso. Lo que aparece ante el espectador es un ruido visual, una película completamente borrosa...o quizás borrada que alude a un pasado también difuso y olvidado. Todo parece haber desaparecido y lo que antes era el reflejo de una presencia es ahora una ausencia manifiesta o nada más que una sucesión de luces y sombras. J.P.V. trabaja con un material preexistente pero sin pretensiones apropiacionistas sino como un director que se sirve del collage, para cuestionar, en cierto modo, la misma existencia de la/una realidad como un todo. Junto a la proyección son mostrados los negativos impresos que conforman esta película, la copia original en 35 mm y todos los elementos que acompañaban a la pieza en su origen cuando fue descubierta en la tienda de antigüedades.
Exposición. 17 dic de 2024 - 16 mar de 2025 / Museo Picasso Málaga / Málaga, España
Formación. 01 oct de 2024 - 04 abr de 2025 / PHotoEspaña / Madrid, España