Descripción de la Exposición Omega, última letra del alfabeto griego. Se relaciona con el final de algo pero inmediatamente es seguida por el renacimiento de Alfa, en un continuo incesante. Su color es negro. Omega se usa para denotar gran cantidad de cosas, generalmente en su etapa final, o en su etapa destructiva. Omega tiene forma de cero abierto, una forma que podríamos completar para cerrar con nuestra intuición, pero que sin embargo pronuncia su ruptura y dibuja un portal hacia una nueva situación o dimensión. Ese espacio ausente (la parte que podría completar el cero) es donde radica la posibilidad de la toma de una dirección no prevista, posibilidad sugerida por la materia que compone la densidad invisible de la letra. Podemos preguntarnos si es la parte más blanda, o más dura, más sólida o más permeable de la letra. Se dice que el cerebro tiende a percibir las formas cerradas, a seguir patrones y a obedecer líneas y estructuras. Esto es lo que nos lleva a intuir el cuerpo cerrado de la o, y del cero, contenido en omega. En Omega la apertura es la oportunidad de transformar la herencia y de convertir el tramo final que sella la existencia de la estructura en una manifestación de la voluntad de ser libres. Omega, letra negra, simboliza la espiral, es decir la cualidad de que el circulo se trace y, asimismo, el comienzo y el final se observen y conozcan, existan sin sellarse. Omega es la apertura a la posibilidad de transformar nuestra especie observando los ciclos y mutando sobre ellos mismos. Las puertas dan la seguridad que del otro lado hay algo. Las puertas son la invitación.
Exposición. 31 oct de 2024 - 09 feb de 2025 / Artium - Centro Museo Vasco de Arte Contemporáneo / Vitoria-Gasteiz, Álava, España