Descripción de la Exposición
M. Laura Benavente Sovieri presenta su exposición individual, que describe como un proyecto post-documental que continúa la línea de sus investigaciones recientes sobre el desarrollo urbano y social de la ciudad de Las Palmas. Su trabajo artístico indaga en las ciudades, individuos y las costumbres del sujeto contemporáneo así como sus modos de hacer.
La artista rescata la historia de la antigua Sala de Fiestas Altavista y su relación con la ciudad. Destaca que «Este edificio encierra el pasado vibrante de la ciudad y su transformación en un arco temporal que va desde su vida como sala de fiestas, abierta en el año 1964 y cerrada el año 1979, hasta su conversión en Iglesia fundada por la comunidad coreana».
El desarrollo de este proyecto artístico está vinculado a la investigación artística de M. Laura Sovieri sobre el turismo y las transformaciones relacionadas con sus flujos en Canarias desde la segunda mitad del S. XX hasta el presente, tratando de seguir la huella que ha dejado el turismo de masas en la ciudad de Las Palmas, y la transformación que esta tiene en el entorno y la sociedad. «Hay una cara de Las Palmas que surge con el despertar del turismo de masas en la década de 1960. Por aquel entonces, la ciudad despuntaba por su aire cosmopolita y aperturista, un momento donde se trataba de sofisticar el territorio a través del turismo. El puerto fue el telón de fondo de este proceso, pero allí lo internacional no está relacionado con la cocina francesa o los espectáculos exóticos, sino con marineros rusos y coreanos».
La muestra incluye tres instalaciones fotográficas con diverso material gráfico y una instalación sonora, que incluye un tocadiscos, que recoge el vínculo del edificio con lo musical, su pasado como sala de conciertos y su vinculación actual con los cultos religiosos con coro gospel. «Durante estos años, la vida de la Sala Altavista era bulliciosa: con ritmos delirantes y todo tipo de espectáculos. No obstante, este esplendor comenzó a desdibujarse unas décadas más tarde, cuando la capital de la isla dejó de ser puerto franco y el turismo se trasladó al sur. En los ochenta, la sala de fiestas Altavista, un edificio de tan extravagante figura, se convirtió en iglesia evangélica. Hasta la fecha, en este lugar se celebran cultos y cantos de música espiritual».
Sus investigaciones sobre la transformación de este edificio, convertido en la actualidad en iglesia coreana evangélica, comenzaron en 2018. La artista lo describe como «un edificio impresionista que nunca entró en el canon estilístico de los movimientos modernos de la época, quedó fuera de la historia de la arquitectura en Canarias. Sin embargo, es en las guías turísticas donde se pone de manifiesto su relevancia en la estampa de la ciudad. Su enclave elevado, en lo alto de los jardines del Parque Doramas, lo convirtió en un punto estratégico del paisaje urbano: por las vistas que ofrece desde sus amplios ventanales así como por su propia imagen coronando la ciudad desde lo alto».
M. Laura Sovieri concluye que «Se trata, por tanto, de una arquitectura de la mirada, que nos acerca no sólo una historia que se sigue susurrando a través del edificio, sino también del encuadre que fijó la imagen turística de la ciudad».
Exposición. 31 oct de 2024 - 09 feb de 2025 / Artium - Centro Museo Vasco de Arte Contemporáneo / Vitoria-Gasteiz, Álava, España