El trabajo de Aitor se desarrolla principalmente en el ámbito de la pintura pero con una actitud abierta a otros medios, como la fotografía y el video, así como diferentes tipos de materiales y técnicas que le son útiles y "utilizables" según las considere apropiadas para cada proyecto. En general su obra gira en torno al triángulo: "lugar, acción, personaje" creando pequeños fragmentos narrativos que a su vez forman conjuntos más amplios en los que el espectador busca claves para la comprensión de la obra, de su propio contexto sociocultural y de su punto de vista personal.

La exposición actual tiene como referencia la ciudad, particularmente Los Ángeles. El artista ha trabajado durante meses en un proyecto de investigación y creación sobre las peculiares características urbanas y socioculturales de esta ciudad, extrapolando este ejemplo a otros casos, por lo que ... ha resultado ser de un marcado carácter sociológico. Paralelamente y en relación a esto ha desarrollado Night Walker, un a serie de pinturas y una instalación, en las que se investiga la ciudad desde un punto de vista más psicológico y vivencial. Nos encontramos ante una especie de diario personal compartido, para cuya construcción ha utilizado no solo experiencias y materiales personales sino también elementos extraídos de películas, textos e Internet, ofreciéndonos una serie de imágenes y lugares mentales entre realidad y ficción en los que no podremos reconocer ninguna localización concreta, pero sin embargo, en nuestro interior, nos resultan extrañamente familiares.

Como hilo conductor entre las dos plantas de la galería, se encuentran dos murales con el texto "Junkyard of dreams" (vertedero de sueños), esta frase es extraída de un libro del sociólogo Mike Davis en la que describe la dualidad de la ciudad, su capacidad para atraer a la gente que quiere realizar su sueño (Hollywood sobre todo) pero que al mismo tiempo alberga a gente que vive en una especie de esperanza por un sueño que difícilmente se realizará. Como guiño y parte de la exposición se crea una edición limitada de camisetas con dicho eslogan. En las grandes ciudades las tiendas de souvenir venden camisetas que funcionan como recuerdo y contribuyen a ensalzar su imagen, a menudo artificial. Esta camiseta funciona igual pero con un slogan totalmente desmitificador.