Descripción de la Exposición
“New Spain” reúne sete artistas espanhóis emergentes numa exposição que inaugura a 14 de julho, na Solar Galeria de Arte Cinemática, e que marca o primeiro dia da 26ª edição do Curtas Vila do Conde Festival Internacional de Cinema.
A exposição, fruto do trabalho desenvolvido pelo curador galego José Manuel Lopez (atual colaborador do Museo de Arte Contemporáneo, MARCO, de Vigo e do Centro Galego de Arte Contemporánea, CGAC, de Santiago) e Nuno Rodrigues, codiretor do festival, visa explorar as noções de paisagem e intimidade através de diferentes media. Os artistas Carla Andrade, Inés García, Laida Lertxundi, Lois Patiño, Natalia Marín, Samuel M. Delgado e Helena Girón apresentarão instalações site-specific, aliando diversos meios, como o filme, o vídeo e a fotografia, desafiando as fronteiras entre o cinema e as artes plásticas.
Duas das obras expostas em “New Spain” serão absolutamente inéditas. “No Hay Tierra Más Allá”, de Samuel M. Delgado e Helena Girón, questiona – quer através do dispositivo, quer do conteúdo – a perspetiva da história oficial espanhola relativamente à política expansionista da era colonial. Carla Andrade apresentará uma nova instalação a partir do seu filme “El paisaje está vacío y el vacío es paisaje”, convocando as lições do ocultismo e da filosofia andina em torno da experiência estética.
Esta Nova Espanha expressa o olhar renovado deste grupo de artistas, quase todos nascidos na década de 80 e a trabalhar fora do país de origem. Assim, a ideia de desterritorialização atravessa toda a exposição: por um lado, a alusão tragicómica do título à época dos descobrimentos espanhóis na América do Sul e respetivo falhanço do império, em articulação com a condição estrangeira do grupo de artistas; por outro, o cruzamento dos territórios do dispositivo convencional do cinema e os do contexto de galeria.
Lois Patiño é um dos cineastas espanhóis emergentes mais conhecidos. Explora, através do vídeo, as escalas da natureza e a questão da temporalidade nas imagens em movimento. Na fotografia, Carla Andrade trabalha também com paisagens naturais, mas essencialmente através da noção de vazio, não como uma ausência, mas como produtor de sentido. Por outro lado, Laida Lertxundi regista a vida diária mas fragmentada de Los Angeles, filmando a paisagem da cidade, mas também as pessoas que lá vivem, perscrutando essa relação entre afetos e geografia. Com formação em belas artes, Inés García combina a sua experiência prévia com o cinema, resultando em sequências fixas filmadas em cenários urbanos, onde o movimento dentro do quadro aparece como uma performance. Realizadora, Natalia Marín combina uma estética experimental com uma abordagem etnográfica numa obra essencialmente documental. Um pouco como o duo Samuel M. Delgado e Helena Girón, que trabalha em filmes e vídeos de não-ficção, cruzando os mundos aparentemente opostos do mito e da matéria.
O projeto expositivo “New Spain” inclui ainda sessões especiais, uma visita guiada, um debate e uma performance de cinema expandido, num programa paralelo integrado no festival Curtas Vila do Conde, a decorrer entre 14 e 22 de julho, no Teatro Municipal de Vila do Conde. Uma das sessões especiais será inteiramente dedicada ao trabalho de Laida Lertxundi, com a projeção de seis filmes da realizadora numa curadoria de Maria Palácios Cruz, vice-diretora da Lux Films.
Outras duas, programadas por Gonzalo de Pedro Amatria (programador do Festival de Locarno) sob o título “Muchos Símbolos y Ningún Significado”, reúnem um conjunto de filmes muito especiais e fora do lugar. De vídeos musicais a trailers, do documental ao experimental, as escolhas arrojadas e singulares de Amatria fogem aos discursos hegemónicos das produções industriais. Através do recurso ao humor, à ficção-científica e de uma aproximação lúdica às ferramentas audiovisuais, os jovens cineastas espanhóis refugiam-se da decepção frente ao estado das coisas criando novas formas de expressão afastadas dos esquemas clássicos.
Maria Palácios Cruz e Gonzalo de Pedro Amatria estarão presentes num debate conjunto com os curadores, José Manuel Lopez e Nuno Rodrigues, e com alguns dos artistas, a acontecer no dia 20 de julho, no Teatro Municipal de Vila do Conde.
Exposição New Spain
Solar – Galeria de Arte Cinemática
O programa paralelo “New Spain” terminará a 21 de julho com uma performance de cinema expandido, intitulada “Even Silence is Cause of Storm”, protagonizada pela dupla Adriana Vila e Luis Macías, que explora a manipulação de película 16 mm ao vivo para a criação de um novo espaço sensorial.
Organizada pela Solar Galeria de Arte Cinemática em parceria Curtas Vila do Conde, a exposição New Spain - aberto de segunda a sábado - é apoiada pela AC/E – Acción Cultural Española, República Portuguesa – Cultura, DGArtes, Município de Vila do Conde.
“De todas las historias de la Historia —escribió el poeta Jaime Gil de Biedma— la más triste sin duda es la de España, porque termina mal”. Cuando se nace en España se obtiene automáticamente un certificado de náufrago de la historia, “como si el hombre, harto ya de luchar con sus demonios, quisiera terminar con esa historia de ese país de todos los demonios”, concluye Gil de Biedma en la voz del cantautor Paco Ibáñez que puso música a sus palabras. Antes de ese fin de la historia, aquella España Imperial que trataba de inocular en el resto del mundo la hispanidad y el catolicismo tenía como lema Plus Ultra («Más allá»), dos palabras que figuran todavía en la bandera y el escudo españoles. Pero, incluso cuando el Reino era joven y su Historia estaba todavía por venir, España ya estaba tratando, inadvertidamente, de refundarse. Así, con la jactancia pomposa del conquistador, los prohombres de la época llamaron Nueva España o New Spain al primer virreinado español en las “Indias” recién descubiertas, un territorio que ocupaba entonces desde América Central hasta el norte de California, y desde San Francisco hasta Cuba pasando por gran parte de la actual Texas.
Expandirse, volcarse más allá de sus fronteras, ese es el sueño de todo imperio; un sueño al que sigue siempre un duro despertar con regusto a utopía desgastada y a epitafio. Desde entonces, la «marca España» ha tratado de refundarse en múltiples ocasiones. El escritor gallego Castelao, por ejemplo, llamaba Hespaña a ese nuevo país que debía reinventarse una vez más, añadiéndole la H inicial de Hispania para sortear así toda ascendencia del viejo Reino de Castilla. Y la España contemporánea no es, por supuesto, una excepción: fragmentada política y socialmente, diluida en la fantasía de “Europa”, azotada por la enésima crisis sistémica (“nuestra famosa inmemorial pobreza”, la llamaba Gil de Biedma), los 506.030 km² de su configuración actual se han convertido en un territorio difuso (sus fronteras están perfectamente delimitadas, no así su identidad). La soñada utopía española terminó convirtiéndose en una inevitable atopía, en un lugar inexistente, por lo que también sus imágenes serán apátridas: imágenes sin lugar de un lugar sin imágenes.
La idea de España ya no está (si es que alguna vez estuvo) en su geografía y los creadores que conforman esta exposición parecen buscarla plus ultra, más allá de sus fronteras, o cuestionar directamente esa idea como Helena Girón y Samuel Delgado en No hay tierra más allá. Una España atópica a abandonar (como tantos jóvenes españoles) o, al menos, a reinventar o reimaginar a través de unas imágenes que no son de España pero la evocan constantemente. Cuando comenzamos el proceso de selección de obras para esta exposición una característica común se fue haciendo presente en un gran número de los nombres barajados: muchos se encontraban fuera de lugar, viviendo o trabajando más allá de las fronteras de España, errantes todos ellos en busca de nuevas imágenes y nuevos sonidos, como el caminante de Winterreise de Franz Schubert en el que se inspiró Inés García para su instalación homónima. Un ciclo de veinticuatro canciones para piano y voz sobre un hombre que vive un desamor y comienza un viaje hacia lo desconocido: “Como extranjero he llegado, como extranjero me vuelvo a ir”, se escucha en la primera de ellas.
El resultado de esa atopía común es esta New Spain, una exposición de cineastas españoles fuera de lugar en la que España queda fuera de cuadro, como un no-lugar levantado sobre imágenes des-situadas que se buscan en su exterior (desde la cercana Marruecos al desierto de Atacama en Chile, ambas antiguas colonias españolas, pasando por los parajes nevados de Austria o el interior de los EE.UU.) o en el lienzo desdibujado de su propia historia (desde el izquierdismo político de los años 70 a la colonización de las Islas Canarias en el siglo XV, antesala y ensayo de la conquista de América). Seis instalaciones site specific que expresan la mirada de un grupo de creadores, casi todos nacidos en la década de los ochenta, acostumbrados a trabajar fuera de su país de origen. En New Spain se unen el gesto estético con el gesto político, pero sin altavoces ni consignas, pues todos ellos buscan la manera en que, como afirma Laida Lertxundi sobre 025 Sunset Red, “lo político pueda estallar, determinar una vida, formar una sensibilidad, e inscribirse en un cuerpo”. El viaje y el desplazamiento —no solo físicos, también a través de la rememoración como en el caso de Lertxundi— ha sido siempre una herramienta para “comprender” el mundo, para extrañarse y volverse extranjero de uno mismo, para desterritorializarse (es decir, para desprenderse del territorio familiar como quien se desprende de la ropa que ha vestido a lo largo del día).
«Pero yo ya no soy yo, / ni mi casa es ya mi casa», escribió Federico García Lorca. Y ese es el momento preciso de la constatación de que hay que partir —a pesar de que el propio Lorca no lo hiciera— en busca de un nuevo lugar, de nuevos paisajes que se convertirán en proyecciones emocionales y espacios mentales (aunque, lo sabemos bien, todo paisaje es siempre una proyección, una herida interior). Las instalaciones de New Spain habitan en este paisaje emocional que es también un lugar mental: sus autores viven o trabajan fuera de España, se desplazan a otro lugar —o a otro tiempo, quizá— y lo filman en celuloide o lo graban en digital, pero estas “imágenes sin España” remitirán, una y otra vez, a una España será siempre evocada, invocada incluso como un fantasma (o, en el caso de Helena Girón y Samuel Delgado, como una momia indígena de Las Islas Canarias, también ella desplazada y fuera de lugar pues se conserva en un museo de Madrid). Esa será literalmente la operación llevada a cabo por Natalia Marín en New Madrid, “un ensayo sobre las utopías fallidas”, sobre el simulacro y los lugares construidos como copias, en el que Marín busca y encuentra los ocho pueblos que se llaman Madrid en los Estados Unidos y se da cuenta, en sus propias palabras, de que en algún momento de su corta historia esos ocho proyectos urbanos han fracasado. La historia, evidentemente, se repite. Laida Lertxundi, residente desde hace años en Los Angeles, realiza un proceso similar en 025 Sunset Red: a partir de los reconocibles paisajes del Oeste norteamericano realiza una “autobiografía abstracta” en la que rememora su infancia en el país vasco en el seno de una familia de comunistas durante los últimos años de la dictura franquista.
Finalmente, en New Spain confluye también una segunda atopía: trabajando tanto con la materialidad y la “gravedad” de la película fílmica (Inés García, Helena Girón y Samuel Delgado, Laida Lertxundi) como con la virtualidad y la “ligereza” del vídeo digital (Lois Patiño, Natalia Marín, Carla Andrade), estos siete creadores se encuentran fuera de lugar tanto en la sala de cine como en la galería de arte, si es que tal diferenciación sigue teniendo sentido hoy en día: esta New Curtas Vila do Conde – Festival Internacional de Cinema Spain es, y no podía ser de otro modo, un territorio híbrido, sin fronteras, entre la “caja blanca” del museo y la “caja negra” del cine. Porque la imagen contemporánea no puede prescindir ni de la luz del museo ni de la oscuridad del cine, ni del día ni de la noche (el departamento solar y el departamento lunar, como los describió una vez el fotógrafo Jeff Wall). El resultado de esta doble atopía son imágenes y sonidos alienígenas, lunares, como los desiertos de 025 SUNSET RED de Lertxundi, de The Landscape is Empty and Emptiness is Landscape de Carla Andrade o de Fajr de Lois Patiño, en el que además escuchamos el adhan, el cántico de llamada a la oración que suena desde las mezquitas antes de la aparición del disco solar; como los Alpes nevados que recorre Inés García en Winterreise acompañada únicamente por las palabras de las canciones de Schubert; o como los sonidos del Atlántico capturados con hidrófonos por Helena Girón y Samuel Delgado en No hay tierra más allá, una inmersión acrecentada por la presencia en sala de un cubo que contiene agua de ese mismo océano que, en su día, unió la Vieja y la Nueva España.
José Manuel Lopez
Curador
Actualidad, 10 jul de 2018
El verano trae interesantes aperturas en Portugal (Lisboa, Porto, Braga, Ponta Delgada, Bragança...)
Por Gustavo Pérez Diez
Ocupando un lugar destacado está la primera gran muestra en Portugal del angloindio Anish Kapoor, que organiza el Museu Serralves en colaboración con la Fundación Bancaria "la Caixa".
Exposición. 19 nov de 2024 - 02 mar de 2025 / Museo Nacional del Prado / Madrid, España
Formación. 23 nov de 2024 - 29 nov de 2024 / Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS) / Madrid, España