Aniquilamos naturaleza para subsistir, sin conciencia de que aniquilando la naturaleza aniquilamos nuestro propio sistema de vida. Siempre me pregunto sobre la naturaleza humana y su fundación. Las relaciones con el entorno, con los sistemas de la vida que nos circundan y con el propio ser en el mundo. La arquitectura moral y biológica de la especie humana, que nos pone frente nosotros mismos y a nuestro contexto social. Pienso en escenas de un mundo que vive en relación y en oposición con sus recursos, sus límites y sus anclajes. Me gusta poner en imágenes situaciones extrañas y ver a mis personajes... tan vacíos, tan apáticos, como si nada importante realmente sucediera. Una calma espectral y desinteresada. Este desastre inminente no los invade, no los afecta, y no cambia el curso de sus vidas (por lo menos no en el instante en el que la pintura detiene el tiempo).