Esta exposición es una muestra de constancia y madurez fotográfica a cargo de Salvador Gómez, la exposición esta dividida o entremezclada en texturas, retratos y paisajes. Técnicamente se puede decir que el trabajo de las fotografías es de un gran nivel profesional, sin olvidarnos que es fotografía analógica en blanco y negro en la era del digital.

Las texturas son fascinantes, una realidad que nos envuelve pasando desapercibida aun estado presente, Salvador Gómez nos muestra en todo su esplendor la magia de sus formas abriendo un mundo de imágenes sorprendentes, en su rareza o equilibrio según se quiera mirar. El paisaje y el retrato dejan constancia de sus viajes a varios países..., unido a su profesionalidad la sencillez del momento tan buscado ... por cualquier fotógrafo, se une la belleza y la humanidad de la vida cotidiana de otras culturas, dejando constancia de un presente ya pasado.

Un pequeño paseo que puede ser gratificante para las personas que visiten la exposición.