Descripción de la Exposición ------------------------------------------------------- ------------------------------------------------------- El lenguaje fotográfico de Ricardo Cana evidencia su inicial formación como pintor y escultor, como escultor por la importancia que le otorga a los propios aspectos formales de sus maquetas y a la figura humana. Protagonista de muchas de sus obras, como pintor por la preponderancia que en ellas tienen los juegos cromáticos, y , porque, según sus propias palabras, en sus fotografías pinta no con materia sino con luz en un proceso de trabajo con los focos, que va improvisando, encontrando su colorido al azar, sin partir de una idea pre-definida y sus resultados finales son una perfecta simbiosis de forma y color, según un “viejo postulado” aplicado, desde siempre, a muchos buenos maestros de una y otra especialidad plástica. Ricardo construye sus propios escenarios, animados, a veces, por una luz monofocal que ilumina, indistintamente figuras o espacios, dándoles protagonistas es el impacto del color., con audaces alternancias entre tonos fríos y cálidos, y el juego formal de la alternancia y correspondencia de los volúmenes, en otros lo que nos atrae es la inquietante intencionalidad argumental, agudizada por los llamativos contrastes de luces y sombras, en verdaderos juegos expresivos de estirpe “neobarroca”, esas confusas figuras negras, quizá cubiertas por la sombra de la duda, contrastados sus perfiles sobre una pincelada de luz cegadora que, por una vez, no clarifica el entorno, sino que contribuye, decisivamente, a acentuar el “dramatismo” ambiental...quizá reflejo de un “dramatismo” interior. Y el respeto y apego de nuestro artista a esa tradición pictórica de raigambre clásica, testigo de su formación académica y aunque sus caminos hoy sean otros, se nos vuelve a evidenciar en sus espacios atemporales, quizá “congelados” a la manera “metafísica”, donde el propio “yo” puede viajar, a través de la siempre atrayente imagen de una puerta, metáfora de infinitas simbologías, por el camino que le traza una vigorosa diagonal, o por el resquicio luminoso de una misteriosa grieta, quizá hacia el todo... o, quizá hacia la nada.
Exposición de los últimos trabajos de Ricardo Cana. Una serie de 15 fotografias sobre aluminio en las que refleja interiores imaginarios, a veces con personajes, destacando el uso del color y las geometrias.