Descripción de la Exposición
El Museo de Arte de El Salvador, con la colaboración de ARISTA, presentan la obra del escultor guatemalteco Max Leiva (1966), cuya representación de la figura humana está cargada de gran fuerza y expresividad.
Sobre su obra y trayectoria Silvia Herrera Ubico historiadora de arte guatemalteca dice:
La mayoría de artistas van a su estudio todos los días con la gana de saber un poco más de sí mismo y de todo lo que le rodea y le impacta.
A lo largo de 20 años de buscar/encontrar respuestas a través de la escultura, Max Leiva ha engendrado una hilera de criaturas que hablan, cada una como puede, de lo que le ha pasado por la mente y de lo que lo ha asaltado como ser humano. Como espejos diminutos que reflejan sólo una parte o gotas que brotan y que no agotan, cada una atestigua un magma visceral.
Max Leiva ha sido un destacado deportista y es un hombre de disciplina. Así ha emprendido su vida y así aborda su trabajo escultórico. Utiliza la figura humana para crear juegos de empujes. Sus esculturas transmiten la idea de transposición y de movimiento, capturan el choque de fuerzas, la energía contenida o más bien potencial.
Los nudos de fuerza y los conjuntos humanos dispuestos como escuadras y hélices que ponen en movimiento y sostienen, a la vez de sostenerse, conforman figuras en tensión física, psicológica y social. En algunos casos, la condición autorreferencial de sus personajes es puesta de relieve; en otros, destacan una peculiar vinculación e interacción. En estos juegos de formas y de individuos, Leiva también se ocupa de sacar a luz el lado oscuro, difícil y nada llano que tiene la vida, la relación consigo mismo y con los demás. Las relaciones, los contrastes, las desavenencias, los desacuerdos, las divergencias, los antagonismos, los conflictos, los encuentros, las afinidades, las simpatías son los ejes que desencadenan estos grupos de personajes.
Cada una de estas piezas prescinde de lo que no es esencial. Sus personajes son abreviaturas que condensan años de trabajo buscando el gesto y la expresión. Esa condensación es también sinónimo de síntesis y la síntesis, de experiencia.
El acierto de estas obras está en que resuelven, con aparente sencillez, la complejidad de los argumentos que las provocan. Son como epifanías de momentos en que surgen revelaciones. Están allí como si no pasara nada, y ese estar exterioriza una visión de algo más.
Silvia Herrera Ubico, 2016
Exposición. 19 nov de 2024 - 02 mar de 2025 / Museo Nacional del Prado / Madrid, España
Formación. 23 nov de 2024 - 29 nov de 2024 / Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS) / Madrid, España