Descripción de la Exposición Por eso Belzunce alude a que hay que atrapar esos paisajes africanos -el concepto de paisaje es occidental y no corresponde a lo que el artista halla ante sí- "con los ojos" y, en ese posicionarse, ya está dada la obra -algunos exploradores ya aventureros de otros siglos así lo entendieron y por eso de lo que vieron solo nos dieron un relato, una narración que admitía analogías pero de ninguna manera ni realidades ni verdades-, pero como que está en aquellos parajes para dar testimonio de otras sensibilidades, no tiene más remedio que plasmar lo que los ojos le ofrecen e intentar ofrecérnoslo con los mismos materiales del lugar, aquellos que responden al acto instintivo, a lo que llamamos una actitud salvajes. Lo que quiere decir según otras posibilidades de establecer un conocimiento. Las obras de Manolo Belzunce realizadas en Marracuene son el testimonio directo de que hay otra manera de expresarse, de dar testimonio del entorno, de que existe otra experiencia y expresión estética posible. Observemos sus trabajos y penetremos en el fondo, veamos las materias que allí quieren ser expresivas y cómo son presentadas. Un occidental nos está ofreciendo en directo lo que unos aborígenes no tienen necesidad de racionalizar pero que, en cambio les sirven, a ellos, como agentes y signos para desarrollar su existencia. Aquí no establecemos juicios sociológicos simplemente, como pedía Baudelaire, ante el distanciamiento forzoso en el que nos encontramos con esas otras realidades -mientras no las transformemos en las equivalentes a las nuestras- pedimos y ofrecemos comprensión, aunque las percibamos con dolor en el bazo (soleen) -nuestro sentido profundo positivo o negativo, el compromiso- y queramos comunicas, hacer partícipes a los demás de nuestras vivencias profundas.
Formación. 08 may de 2025 - 17 may de 2025 / Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS) / Madrid, España