Descripción de la Exposición
El museo presenta una instalación de once obras de la colección permanente de los siglos XIV al XVII cuyos marcos, tres de ellos originales, ejemplifican la relevancia artística de este elemento. Provenientes de España, Francia, Italia, Alemania y Países Bajos, evidencian una amplia variedad de estilos según el período en el que fueron realizados y el criterio de las modas, fundamentalmente del mobiliario, constituyendo siempre un valor añadido a las pinturas a las que acompañan, embellecen y protegen. El barón Hans Heinrich Thyssen-Bornemisza prestó una especial atención a este singular aspecto del coleccionismo y llegó a solicitar dos estudios de los marcos de su colección en la década de 1980.
Aunque no son numerosos los marcos originales que han llegado a formar parte de la colección, sí se han conservado muchos antiguos de gran relevancia. El propio barón Hans Heinrich Thyssen-Bornemisza prestó una especial atención a este singular aspecto del coleccionismo y llegó a solicitar dos estudios de los marcos de su colección en la década de 1980. Los seleccionados para esta exposición muestran una alta calidad técnica y estilística que los convierten en piezas únicas y valiosas en sí mismas y, además, aportan una información adicional que contribuye a conocer de forma más completa el contexto histórico y artístico de las pinturas que encuadran.
De las once obras que conforman esta exposición, tres de ellas cuentan con marcos originales. Una es el Tríptico portátil de la Crucifixión (hacia 1370-1375), de Lorenzo Veneziano, cuyo marco, denominado arquitectónico, está tallado en la misma tabla en la que el artista pintó la obra e imita el pórtico de una iglesia gótica. En segundo lugar, el Díptico de la Anunciación (hacia 1433-1435), de Jan van Eyck, que se inscribe en la tradición de los retablos del Norte de Europa del Renacimiento y cuya peculiaridad reside en que el artista pintó dos marcos a modos de trampantojo, uno principal de mármol rojizo y otro secundario que simula piedra gris como si fuera mármol o alabastro. Por último, el Retrato de Johann von Rückingen (anverso) y Personaje con escudo (reverso), (1487), de Wolfgang Beurer, que cuenta con una enmarcación característica del Renacimiento alemán y cuya decoración pictórica en los largueros laterales indica que fue realizada ex profeso para el cuadro.
Los marcos expuestos presentan características y elementos que testimonian la diversidad de estilos y técnicas empleadas según la zona y la época en la que fueron realizados. Ejemplos de ello son los diferentes tipos de decoración que ostentan, desde los zigzag y perlas redondeadas del marco, posiblemente español, de Retrato de un joven (década de 1490), de Andrea Solario, hasta los diversos ornamentos vegetales de otros como el de Retrato del dux Francesco Venier (hacia 1554-1556), de Tiziano, de origen italiano del siglo XVII, y el de La parábola del sembrador (hacia 1560), de Jacopo Bassano, denominado “auricular Medici”, estilo creado para re-enmarcar las pinturas que el cardenal Leopoldo de Medici albergaba en el Palacio Pitti de Florencia.
La decoración vegetal puede verse también en las molduras de las dos obras de El Greco presentes en la muestra que, además, producen interesantes juegos de luces y sombras que otorgan un mayor volumen a los conjuntos. Estas son Cristo abrazando la cruz (hacia 1587-1596), con un marco francés de estilo Luis XIII, y La Inmaculada Concepción (hacia 1608-1614), realizada en colaboración con su hijo, Jorge Manuel Theotokópoulos, encuadrada por un marco típico barroco español.
Destaca también el uso del luminolegno en el marco de Vista de un puerto fluvial con el Castillo de Sant’Angelo, del Maestro del Monograma IDM, técnica empleada en el Véneto que consiste en el intercalado de oro y madera, y la sobriedad que emana La fachada occidental de la iglesia de Santa María de Utrecht (1662), de Pieter Jansz. Saenredam, que presenta un enmarcado típico barroco de Holanda y del sur de Alemania, de color oscuro y de madera noble, con una decoración llamada rizo holandés.
El marco más moderno de la muestra es el de la pintura de Michiel Sweerts Muchacho con turbante y con ramillete de flores (hacia 1658-1661), que se sitúa entre 1735 y 1750. De factura romana, este tipo de enmarcación tuvo gran difusión en el siglo XVIII y recibe el nombre de dos pintores italianos, Carlo Maratta y Salvatore Rossa.
Exposición. 19 nov de 2024 - 02 mar de 2025 / Museo Nacional del Prado / Madrid, España
Formación. 23 nov de 2024 - 29 nov de 2024 / Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS) / Madrid, España