Tras sus recientes exposiciones en Miami y Nueva York, Andrés Ferrandis vuelve a España a presentar su cuarta exposición individual en nuestra galería.

Con Los ojos son ventanas Ferrandis muestra a través de una veintena de obras y una instalación su entrega absoluta a la abstracción, a la luz y al color. Su discurso es esta vez más visible al ojo del espectador, el paso del tiempo en todas sus medidas, la huella del tiempo, el ciclo de la vida, su búsqueda continua de retener a través del orden la emoción de un momento.

Sus obras juegan a engañar nuestra percepción a través de líneas yuxtapuestas de color que ordena perfectamente creando un superficie que vista a distancia parece homogénea y sólo al acercarnos percibimos que se trata de un juego de líneas ... que surgen de diferentes niveles que esculpe y se apropia del espacio. La influencia del constructivismo, de artistas conceptuales como Donald Judd, Dan Flavin, Ellsworth Kelly y de arquitectos como Tadao Ando, Renzo Piano y Frank Gehry están presentes en su obra.

La elección del material es parte esencial de su trabajo, pues combina plexiglás con papel de acetato tintado, yute y lino. El cristal crea diferentes estados lumínicos que una vez más nos mantienen expectantes y nos hacen plantearnos si se trata de luz artificial.

A través del color y las texturas que proporcionan los materiales y por encima de todo de su sensibilidad para componer con el color, nos obliga a utilizar nuestros sentidos más primarios, la vista en la actitud de mirar no sólo ver, el tacto (la rugosidad del papel, el brillo, el reflejo, la aspereza) y de una manera indirecta también el olfato y el gusto se activan pues su obra sugiere estados, lugares, horas de luz, temperatura.

La búsqueda de nuevos formatos e instrumentos de trabajo también han diversificado la creatividad de Ferrandis, para la exposición contamos con tres piezas "Minimal Tropical", "Hojas Cayendo" y "Banco de peces" obras que se expanden en la pared a través de tiras de poliéster y con la instalación realizada ex profeso "Escritores mediocres".

En "Escritores mediocres" Ferrandis dispone a lo ancho de una habitación los objetos con los que cuenta en su cabeza antes de iniciar una obra plástica, el espacio y la luz son elementos indispensables en su trabajo.

Recorriendo la instalación empezando por la pared de la izquierda dos espejos cuadrados uno de ellos opaco, contiene un tiempo tubular, pasado, presente y futuro se enfrentan ante el espectador, una estantería con unas naranjas hablan del ciclo de la vida, del tiempo de la cosecha.

A su lado una proyección muestra el pasar de las nubes, el fluir constante de la vida. El neón contiene un tiempo circular.

En la pared central un texto nos lleva a las raíces del discurso de Ferrandis, su concepto de la vida y del arte, su deseo de existir. Un barco de papel navega en un tiempo lineal, no hay lugar para dar marcha atrás.

Unos audífonos con el tema de Billy Holliday "I love you, Porgy" nos traslada a un tiempo efímero pero congelado, una melodía que empieza y acaba y que tuvo lugar en un tiempo que ya no existe pero que tenemos la posibilidad de revivir.

Por último un panel con un boceto de una nube serigrafiada realizado por la mano del artista, elegido y bendecido para que sucumba y trascienda a la muerte de su creador.

Les animamos a que disfruten de esta muestra que confirman la actitud de este artista y el compromiso con la abstracción.

Tras sus recientes exposiciones en Miami y Nueva York, Andrés Ferrandis vuelve a España a presentar su cuarta exposición individual en nuestra galería.

Con Los ojos son ventanas Ferrandis muestra a través de una veintena de obras y una instalación su entrega absoluta a la abstracción, a la luz y al color. Su discurso es esta vez más visible al ojo del espectador, el paso del tiempo en todas sus medidas, la huella del tiempo, el ciclo de la vida, su búsqueda continua de retener a través del orden la emoción de un momento.

Sus obras juegan a engañar nuestra percepción a través de líneas yuxtapuestas de color que ordena perfectamente creando un superficie que vista a distancia parece homogénea y sólo al acercarnos percibimos que se trata de un juego de líneas que surgen de diferentes niveles que esculpe y se apropia del espacio. La influencia del constructivismo, de artistas conceptuales como Donald Judd, Dan Flavin, Ellsworth Kelly y de arquitectos como Tadao Ando, Renzo Piano y Frank Gehry están presentes en su obra.

La elección del material es parte esencial de su trabajo, pues combina plexiglás con papel de acetato tintado, yute y lino. El cristal crea diferentes estados lumínicos que una vez más nos mantienen expectantes y nos hacen plantearnos si se trata de luz artificial.

A través del color y las texturas que proporcionan los materiales y por encima de todo de su sensibilidad para componer con el color, nos obliga a utilizar nuestros sentidos más primarios, la vista en la actitud de mirar no sólo ver, el tacto (la rugosidad del papel, el brillo, el reflejo, la aspereza) y de una manera indirecta también el olfato y el gusto se activan pues su obra sugiere estados, lugares, horas de luz, temperatura.

La búsqueda de nuevos formatos e instrumentos de trabajo también han diversificado la creatividad de Ferrandis, para la exposición contamos con tres piezas "Minimal Tropical", "Hojas Cayendo" y "Banco de peces" obras que se expanden en la pared a través de tiras de poliéster y con la instalación realizada ex profeso "Escritores mediocres".

En "Escritores mediocres" Ferrandis dispone a lo ancho de una habitación los objetos con los que cuenta en su cabeza antes de iniciar una obra plástica, el espacio y la luz son elementos indispensables en su trabajo.

Recorriendo la instalación empezando por la pared de la izquierda dos espejos cuadrados uno de ellos opaco, contiene un tiempo tubular, pasado, presente y futuro se enfrentan ante el espectador, una estantería con unas naranjas hablan del ciclo de la vida, del tiempo de la cosecha.

A su lado una proyección muestra el pasar de las nubes, el fluir constante de la vida. El neón contiene un tiempo circular.

En la pared central un texto nos lleva a las raíces del discurso de Ferrandis, su concepto de la vida y del arte, su deseo de existir. Un barco de papel navega en un tiempo lineal, no hay lugar para dar marcha atrás.

Unos audífonos con el tema de Billy Holliday "I love you, Porgy" nos traslada a un tiempo efímero pero congelado, una melodía que empieza y acaba y que tuvo lugar en un tiempo que ya no existe pero que tenemos la posibilidad de revivir.

Por último un panel con un boceto de una nube serigrafiada realizado por la mano del artista, elegido y bendecido para que sucumba y trascienda a la muerte de su creador.

Les animamos a que disfruten de esta muestra que confirman la actitud de este artista y el compromiso con la abstracción.