Descripción de la Exposición
Confinamiento con Regina es una obra diseñada, desarrollada y perfomatizada por el artista Abel Azcona conjuntamente con la artista portuguesa Regina Fiz Santos. Una obra consecuente y colindante con los proyectos de Azcona en torno a la privación de libertad realizados en España, Francia, Estados Unidos y Colombia.
Durante una semana los dos artistas iberos se confinaron en un espacio habitable perteneciente a una galería madrileña. El proyecto Confinamiento con Regina, realizado con la colaboracion de la galeria Off Limits de Madrid, fue comisariado por la comisaria Marta Oliveres, experta en nuevos medios escénicos, junto al apoyo de la comisaria y galerista Lurdes Fernandez. La obra performativa formó parte de la programación oficial del Queer Weekend Madrid en Off Limits.
En el trascurso de la semana formaron parte activa del proyecto, a modo de visita los fotografos Iban Gonzalez, Rafael Gavalle, Juan Barte y Yago Muñiz. Las expertas en arte contemporáneo Esther Lorenzo y Susan Campos Fonseca. El ilustrador Vik Snake y el bailarín y coreográfo Mauricio Gonzalez. El director de la Plataforma de Arte Contemporáneo Oscar Garcia y los miembros del equipo del confinamiento Lurdes Fernández, directora de Off Limits, Marta Oliveres y Jaime Conde-Salazar y Paloma Chueca comisarios, representantes y profesionales nuevos medios escénicos.
Este proyecto del mismo modo es una búsqueda total a corazón abierto, un dialogo individual entre el artista y su propio yo. Azcona en su larga trayectoria creativa insiste en la dificultad de autoconocerse debido a las problemáticas que acompañan su modo de vida, enfermedades mentales, dificultades de vinculo y desórdenes psicoafectivos.
Día Uno. 8 de abril de 2013.
La Clausura by Jaime Conde-Salazar
A partir de la hora de comer de hoy, Regina Fiz y Abel Azcona se encerrarán en un piso de Madrid. Durante una semana compartirán casa y vivirán juntas buscando lo que son, probando lo que pueden llegar a ser. A propósito de este encuentro, publicaremos durante los próximos días una colección de cinco artículos que queremos que acompañen lo que vaya ocurriendo allí dentro. Todos los días visitaremos a nuestras amigas en su clausura y, después de que pase la noche, intentaremos contar las imágenes que nos hayan visitado.
Día Dos. 9 de abril de 2013.
La Clausura I by Jaime Conde-Salazar
Hay cosas que no deberían decirse. Imagino la posibilidad de permanecer callado y guardar el secreto. Se trataría de cultivar el silencio: empezar con un segundo y dejar que el instante se expanda creando un espacio de calma en el que no hay lugar para la expresión. Un silencio higiénico que impida que la decepción o el espanto estropeen el plan. La casa en la que se debate la identidad está vacía, del mismo modo que está vacío el corazón del ser, como sugirió Jose Luis Pardo (1996:40). La casa está vacía, allí no hay nadie y por eso quizás lo que corresponde es buscar el silencio como labor ontológica. Pero también como protección: que el secreto recubra la casa deshabitada igual que la máscara esconde el ser vacío. Joan Riviére propone en 1929 que la esencia de lo femenino (womanliness) es la mascarada, la sustitución de la superficie propia por otra construida en la que se acata y realiza el deseo de quien sostiene la mirada. “Soy la que no tiene nombre…” que dice la copla. La máscara cierra y tapa con una capa de silencio lo que no puede llegar a nombrarse. La máscara no es la realización de un aspecto de lo que está dentro, del sujeto que la lleva, no es ni siquiera una posibilidad del ser. La máscara es una barrera que niega la visión y arruina la representación. Más allá de lo tapado no existe el lenguaje, lo de dentro no está, no es ni siquiera un punto de vista aunque siempre haya unos ojos mirando desde el otro lado. Cualquier pronunciación referida al ser es falsa, es un señuelo que aplaza la angustia de tener que callar. El secreto es la única verdad que somos capaces de conocer. No hay nadie en la casa y, por tanto, el espacio público es la mascarada, la puesta en escena en la que el sujeto se realiza y desaparece sin fin. Mientras tanto, la casa permanece vacía y en silencio esperando a que un acto de amor infinito reviente sus muros.
Día Tres. 10 de abril de 2013.
La Clausura II by Jaime Conde-Salazar
El propósito es acceder a otro estado de consciencia. Habría que conseguir habitar un lugar en el que no necesitáramos la narración, en el que los relatos y las peripecias estuvieran de más, sobraran. Basta de genealogías, referencias, excusas y explicaciones. No necesitamos conocer los detalles porque sabemos que las justificaciones nos amarran los pies con grilletes. El pasado no existe y no somos resultado de nuestras experiencias. En realidad solo somos cuando nos ponemos ello. Lo único que necesitamos ahora es dar con el lugar sin relatos y construir allí la casa. Dentro de nuestra casa no hablaremos nada y nos dedicaremos única y exclusivamente a pasar los días. Un encierro de cuerpo y alma. Las tareas del hogar serán el reto para nuestra consciencia: al abrir un grifo se traspasará un umbral, en el vestirse nos esperará una epifanía, cogiendo la escoba escucharemos por fin, el silencio. Entonces, el cuerpo se hará presente, se abrirá el infierno y El Diablo se convertirá en regente y constructor de todas nosotras, sus siervas. En ese momento, seremos capaces de doblegaremos nuestro deseo de dar explicaciones y de contar historias liberándonos por completo del lenguaje. La casa engullirá al mundo y éste se desvanecerá como realidad. Y solo nos quedará el amor sofocante y abrasador de los infiernos.
Día Cuatro. 11 de abril de 2013.
La Clausura III by Jaime Conde-Salazar
El hijo busca el castigo. Necesita el correctivo del Padre para saber que existe. La disciplina impuesta es la única certeza que el hijo es capaz de reconocer. El dolor es el premio. El hijo no tiene ninguna intención de cuestionar la autoridad del Padre: su desobediencia tiene como único fin lograr que el Padre sea cada vez más fuerte y sus castigos más contundentes. El hijo no tiene ningún interés por el mundo, solo aspira a ser reconocido por el amor del Padre a palos. Se trata un hijo malcriado que siempre consigue lo que quiere y que no para de preguntar “¿me quieres?¿me quieres?¿me quieres?… (Irigaray, 1993: 134). Mientras tanto la Madre borda una camisetita con hilo de oro que cubrirá el cuerpo de su auténtico hijo bastardo el día de su bautizo.
Día Cinco. 12 de abril de 2013.
La Clausura IV by Jaime Conde-Salazar
Quizás sería mejor mirar para otro lado y hacer como que la cuestión no tiene importancia. Mejor dejarlo pasar. El ritual burgués nos ha enseñado a guardar la compostura. Por mucho que hoy en día nuestras vidas se hayan llenado de personas chillonas e incontinentes, nosotras nos resistimos a la ordinariez y, simplemente, miramos para otro lado y dejamos que la identidad descanse y se conserve como hasta ahora. Identidad… ¿a qué? A estas alturas resulta complicado seguir creyendo que la cuestión de la existencia se pueda resolver en una sola ecuación que iguale dos extremos. La fórmula “yo soy esto” utiliza el ser como hormigón que, al fraguar, transforma la incertidumbre, la disparidad y lo líquido en un único bloque de materia sólida y uniforme. Hablar de identidad tendría sentido si, al pronunciarse, las cosas se convirtieran en pura acción, en estricto devenir. Quizás, siguiendo a José Luis Pardo, deberíamos intentar deshacernos de la identidad y emplearnos a fondo en la producción de intimidad (La intimidad, 1996). Entonces la casa se llenará y acabará convirtiéndose en el auténtico escenario de la lucha gozosa que provocará, por fin, nuestro renacimiento glorioso. Seguramente, cuando esto suceda, ya habremos olvidado nuestros pequeños vicios burgueses.
Día Seis. 13 de abril de 2013.
La Clausura V by Jaime Conde-Salazar
El fin de la clausura. A veces, es difícil reconocerse en la imagen del espejo. Nos encontramos, casi por sorpresa, frente a alguien que no esperábamos. Aun sabiendo que el artefacto es perfecto, resulta complicado llevar a cabo el obligatorio proceso de identificación. ¿Qué tiene que ver esa de ahí conmigo?, ¿por qué se asoma al otro lado si no se parece nada a quien yo deseaba encontrar? No queda más remedio que intentar entender lo que La Otra viene a revelar desde el lado de lo invertido. Y para ello hay que creerse que, en efecto, todo es perfecto siempre, aunque a nosotros no nos lo parezca. No hay escapatoria frente al reflejo: eso es lo que nos toca ver, esa, y no otra, es la lección que, en esa ocasión, debemos aprender. La tarea es permanecer frente a la imagen incómoda sin miedo a devolver la mirada y a pronunciar la pregunta clave: ¿quién eres tú?
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Jaime Conde-Salazar was born in Madrid in 1974. He graduated in Art History in1997 ( Universidad Complutense de Madrid). Thanks to a Fulbright Grant he obtained his MA in Performance Studies in 2002 (New York University). From 2003 to 2006 he directed the Dance Department at the Universidad de Alcalá de Henares (Madrid). From 2006 to 2008 he directed a small Waldorf Kindergarten in Teneriffa. In 2009 he received the Performing Arts Grant from the Spanish Royal Accademy in Rome. As dance critic he has collaborated in different publications such as Por la Danza (Madrid), SuzyQ (Madrid), Ballet/Tanz (Berlin), Mouvement (París), Hystrio (Roma) y Obscena (Lisboa). He is co-founder of the project Continuum(www.continuumlivearts.com). As dramaturgist he has worked in projects by Claudia Faci, Idoia Zabaleta, Filipe Viegas, Ben Benauisse, Lipi Henández and I-Chen Zuffellato. He has premiered two works Swan Lake (2006) and Le Spectre de la Rose (2008) together with Claudia Faci.
Premio. 09 sep de 2024 - 13 oct de 2024 / Madrid, España
Exposición. 02 oct de 2024 - 31 dic de 2024 / Museo de Bellas Artes de Bilbao / Bilbao, Vizcaya, España
Formación. 15 oct de 2024 - 30 jun de 2024 / Museo Nacional Thyssen-Bornemisza / Madrid, España