Hace un año y medio empecé una larga serie de pinturas sobre papeles de 102 x72 cm, en las que trabajé con tal libertad que acabé alejándome sistemáticamente de la anécdota que iniciaba el proceso creativo: la Menina, centrándome en lo que de verdad me importaba: la pintura. De esta manera el resultado roza con frecuencia la abstracción; en bastantes casos cuesta distinguir la figura (cuando la descubres nunca dejarás de verla). Poco antes había realizado unas esculturas de pequeño formato con madera reciclada, en las que las formas geométricas se ensamblan unas con otras persiguiendo el ritmo de una figura femenina cuadrada, sólida, sustentada por la potente estructura del miriñaque. Algunas están pintadas, otras simplemente barnizadas. Alejandro Sales ha seleccionado para este inicio de temporada varios de estos papeles y esculturas con la intención, me pareció a mí, de explorar los límites de la figuración. Alfonso Alzamora Septiembre, 2014